En su casa de campo, casual, con la mano en la cintura y la otra en vientre. Pantalones cortos, calcetas blancas estilo futbolista y su clásico bigote.
Así luce Adolf Hitler en una instantáneas que el más grande genocida que conozca la humanidad decidió censurar luego de publicarse en una revista nazi.
La fotografía se publicó originalmente en Deutschland Erwache (“Alemania despierta”), una publicación que apoyaba al régimen, como tantas que existían en la época.
El problema fue que la imagen no gustó al Führer, quien prohibió su circulación porque “rebajaba su dignidad y daba risa”.
Sin embargo, algunos ejemplares sobrevivieron a la censura, uno de ellos de una manera muy particular.
Alf Roberts, un soldado que prestó servicio para el ejército británico, encontró una edición poco después de ganar la Segunda Guerra Mundial. Estaba en una casa destruida por los bombardeos.
La llevó consigo de vuelta a Reino Unido y se la entregó a sus superiores, que la conservaron sin hacer nada con ella. Pero ahora, 70 años después, historiadores militares publicarán una traducción al inglés.
Al encontrarse con la polémica foto, no dudaron en darla a conocer.
16.04.2015
Tegucigalpa, Honduras
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