Washington, Estados Unidos.- Varios puntos clave tocó Carlos Bernardo Cherniak, embajador de Argentina, sobre las elecciones generales en Honduras durante su participación en la reunión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Los reflectores del mundo están sobre el Consejo Nacional Electoral, según el embajador de Argentina. Honduras aún sigue a la espera de resultados finales y todavía no se lleva a cabo el escrutinio especial, donde se revisarán más de 2,700 actas.
Cherniak aseguró que “Las elecciones en Honduras fueron legítimas y no hubo fraude, ese mensaje es claro y contundente. El valiente pueblo hondureño acudió masivamente a las urnas y reafirmó la soberanía popular”.
Asimismo, aplaudió el trabajo de la “Misión Electoral de la OEA en Honduras”. Luego aseguró que “antes, durante y después de las elecciones se ha dicho muchas cosas”.
Seguidamente enumeró que “se afirmó que el consejo extraordinario de la OEA del 25 de noviembre fue un juicio político, una injerencia externa o un intento de legitimar a un candidato particular”.
El embajador de Argentina argumentó que “La Carta Interamericana Democrática, que todos nuestros Estados suscriben, establece cómo debe interpretarse el principio de no injerencia frente a amenazas al proceso electoral y su transparencia. Es legítimo y necesario activar los mecanismos de la OEA para disuadir a quienes pretendan socavar la voluntad popular”.
“Se dijo que el Consejo extraordinario carecía de sentido porque finalmente se demostró que no hubo fraude, pero cabe preguntarse ¿qué habría ocurrido si la OEA, la UE y otros actores internacionales no hubieran puesto sus ojos sobre esas elecciones?”.
Destacó que la observación electoral independiente fue un garante de transparencia y legitimidad de los comicios.
“Ni injerencia ni operación política, los consejos extraordinarios de noviembre y el de hoy son oportunidades para que el gobierno de Honduras clarifique su posición, como ya lo ha hecho, y sea parte de un diálogo político constructivo más allá de las diferencias”, dijo, y asimismo pidió no utilizar el aparato estatal para “instalar narrativas de fraude que solo debilitan la institucionalidad y afectan la transición democrática”.
“Las declaraciones de altos dirigentes políticos hondureños nos obligan a estar atentos y preocupados. Con apenas una mínima porción de votos escrutados se proclamó ganadora la candidata oficialista (Rixi Moncada)”.
Agregó que cuando el “TREP superó el 50% y era evidente que la candidata oficialista no podía ganar, se denunció fraude y luego, para poner presión, se convocó a los colectivos oficialistas a movilizarse contra el Consejo Nacional Electoral”.
El embajador aseguró que “Después, con más del 90% escrutado, se proclamó vencedor a uno de los candidatos opositores antes de concluir el proceso y, por último, el sábado en la noche le exigieron al representante del gobierno en el consejo electoral (Marlon Ochoa) que no firmara la declaración final, lo que podría hacerlo incurrir en violación de sus deberes de funcionario público”.
“¿Alguien está alentando un golpe institucional en Honduras? Esa es la pregunta que debemos hacernos con seriedad. Esperemos que no”.
Bernardo Cherniak finalizó diciendo que “Todos los reflectores del mundo están sobre el CNE” y que es el único órgano competente para declarar el resultado electoral, cualquiera que sea ese resultado. "No hay margen para violar la voluntad popular; Honduras es parte de nuestra comunidad democrática y queremos que lo siga siendo".