San José, Nicaragua.- La opositora Concertación Democrática Nicaragüense (CDN) felicitó este viernes al presidente electo de Honduras, Nasry 'Tito' Asfura, y le pidió mantener una política de no legitimación del Gobierno que dirigen los esposos y copresidentes, Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua.
"Es esencial mantener una política de no legitimación del régimen Ortega-Murillo, absteniéndose de reconocer farsas electorales" y reconocer que en Nicaragua "no existen condiciones para elecciones libres, justas y competitivas, así como la existencia de presos políticos y una represión sistemática contra la oposición y la sociedad civil", indicó el directorio de ese movimiento opositor nicaragüense desde el exilio en una carta pública enviada a Asfura.
Opinó que esta "postura debe complementarse con una coordinación estrecha con todos los países democráticos de la región y más allá, incluyendo el apoyo a medidas diplomáticas selectivas contra funcionarios responsables de graves violaciones a los derechos humanos".
El grupo político dijo a Asfura que "este nuevo período representa una oportunidad para que Honduras reafirme una posición institucional clara en defensa de la democracia y los derechos humanos, particularmente frente a la crisis que atraviesa Nicaragua".
"En coherencia con estos principios, Honduras puede desempeñar un papel clave mediante una actuación firme en la OEA y en los foros multilaterales, apoyando resoluciones que condenen las violaciones de derechos humanos, farsas electorales y la persecución política en Nicaragua, así como respaldando la plena aplicación de la Carta Democrática Interamericana", consideró.
Las peticiones a Asfura
Asimismo, ese movimiento pidió a Asfura proteger a los nicaragüenses exiliados en Honduras, "garantizando estatus de protección temporal o humanitaria y coordinando con ACNUR y organismos internacionales su asistencia y protección".
"Resulta clave mantener una política coherente en el BCIE (Banco Centroamericano de Integración Económica), oponiéndose a financiamientos que beneficien directamente al régimen Ortega-Murillo y exigiendo condicionalidad democrática, auditorías y evaluaciones de impacto en derechos humanos".
Finalmente, en el marco del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y de los foros internacionales de derechos humanos, incluido el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, "Honduras puede contribuir a una postura regional e internacional clara, que evite la legitimación de dictaduras y respalde mecanismos de investigación y rendición de cuentas por las violaciones cometidas en Nicaragua", indicó la concertación.
El movimiento opositor felicitó al pueblo hondureño por el civismo demostrado durante el proceso electoral y confió en que su gobierno "sabrá honrar estos principios y contribuir a una Centroamérica más democrática y respetuosa de los derechos humanos".
Asfura, del conservador Partido Nacional y apoyado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue declarado el miércoles por el Consejo Nacional Electoral (CNE) como el virtual presidente electo de Honduras, con el 40,26 % de los votos en las elecciones generales del pasado 30 de noviembre.
Sucederá a la gobernante Xiomara Castro, del izquierdista partido Libre -y aliada de Ortega y Murillo-, quien le entregará el poder el próximo 27 de enero.