Tegucigalpa, Honduras.- La Asociación Nacional de Funcionarios y Empleados del Poder Judicial (ANFEPJ) rechazó las recientes declaraciones del candidato presidencial del Partido Liberal, Salvador Nasralla, quien afirmó que los privados de libertad “viven como reyes” en los centros penales del país, y hasta mantienen relaciones con las juezas.
Durante un foro en la Universidad de San Pedro Sula (USAP), Nasralla afirmó que personas privadas de libertad “enamoran a las juezas” y que “las amantes son las juezas”, lo que fue considerado por el gremio como difamación pública.
"Los que están presos tienen dinero porque probablemente llegaron allí por estar involucrados en el negocio de la droga. Entonces, tienen ventajas y enamoran a las juezas. Hay videos de presos famosos que están ahí, viven como reyes y tienen sus amantes, y las amantes son las juezas", mencionó Nasralla durante el foro organizado para conocer las propuestas de los aspirantes presidenciales.
La ANFEPJ señaló que estas afirmaciones son "misóginas e infames" y que atentan contra la dignidad del personal femenino del Poder Judicial y vulneran el profesionalismo de las juezas.
La asociación advirtió que difundir imputaciones de carácter sexual o delictivo sin pruebas constituye violencia simbólica y política, y afecta directamente la confianza de la ciudadanía en la justicia.
Por su parte, la Comisión Interventora de las Fuerzas Armadas en el Instituto Nacional Penitenciario (INP) rechazó categóricamente las afirmaciones de Nasralla de que los internos “viven como reyes” en los centros penales.
Consideraron que estas declaraciones son malintencionadas y desacreditan injustamente al personal militar y administrativo encargado de la seguridad y gestión de los 21 centros penitenciarios del país.
Las autoridades penitenciarias recordaron que la Ley del Sistema Penitenciario Nacional garantiza condiciones dignas y respeto a los derechos humanos, sin que esto signifique privilegios o lujos indebidos.
La ANFEPJ indicó que la campaña electoral no puede utilizarse para difamar ni estigmatizar a instituciones ni al personal que trabaja en ellas, y que los comentarios del candidato son ataques ilegítimos.