Honduras

Campaña del rap y los piropos

Contienda en Venezuela también será recordada por canciones, ocurrencias e insultos. A Capriles, “El Flaco”, también se le ha denominado “El Correcaminos” por las casi 300 concentraciones que hizo en los 95 días que duró la campaña.

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07.04.2014

La batalla electoral entre “El Flaco” y “El Comandante” despertó pasiones inusitadas durante la campaña presidencial venezolana.
El periodo proselitista estuvo lleno de una emotividad que los venezolanos no experimentaban recientemente en temas electorales y que fue arrancada por el candidato opositor, Henrique Capriles Radonski, y el oficialista exmilitar golpista Hugo Chávez Frías.

Chávez, “El Comandante”, favorito en las encuestas, vio mermada sus presencia en mitines por el cáncer en la zona pélvica que padece, pero compensó esas ausencias con una imagen “rejuvenecida” con la que aparecía en carteles con gorra y poses de rapero.

Y también le hizo como cantante, al menos con arreglos musicales muy movidos de sus discursos. “¡Uh!.. ¡ah!.. Chávez no se va”, dice el estribillo de una de las canciones con la voz del mandatario.

En general, las dos candidatos hicieron uso de ritmos que motivan hasta al más indiferente.

“El pueblo ya despertó, todos con mi comandante”, gritó Alicia Perdomo, una furibunda chavista que trabaja en el municipio de El Libertador.
Caracas y muchas otras ciudades han quedado tapizadas de propaganda de los dos aspirantes, por lo que algunas avenidas parecen zonas de carnaval.

A Capriles, “El Flaco”, también se le ha denominado “El Correcaminos” por las casi 300 concentraciones que hizo en los 95 días que duró la campaña.

Durante sus mitines, Capriles, soltero y sin hijos a sus 40 años, piropeó a las mujeres por doquier.
Las féminas seguidoras respondían con agrado a los halagos de Capriles. En el cierre de campaña en el estado de Lara, una joven muy desinhibida escribió en un cartel: “Dame un hijo por el voto, Capriles”.

En los últimos días de la campaña, estos dos candidatos arreciaron la propaganda con diversas concentraciones multitudinarias.
Hay otros sin distinción política que lo que más desean es que termine este periodo electoral y vuelva la tranquilidad porque al final, sea quien sea el ganador, “aquí la cosa será la misma ‘güevonada’ (mala situación)”, dice don Alejo Rodríguez, un español de 75 años que hace medio siglo radica en este país de América del Sur.

“Aquí, como se dice en francés, será la misma ‘merde’ (mier...) porque todos prometen y nadie cumple”, se quejó el septuagenario.
En esta campaña hubo insultos al por mayor, a los fieles a Capriles les apodaron los “escuálidos” o “majunches” (que no sirven para nada). Las elecciones en Venezuela han recibido atención a escala mundial.

Ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) solicitaron acreditación unos 10 mil periodistas de diversas naciones. Por Honduras está presente EL HERALDO.

Hay comunicadores cubriendo estas votaciones de países cercanos como Colombia, Ecuador o Brasil, pero también de zonas distantes como Japón, Rusia y Arabia Saudita.

Los periodistas han sufrido la marcada desorganización del CNE u otras instituciones estatales por el retraso en la entrega de acreditaciones que se solicitaron en las mismas para tener acceso a conferencias y centros de votación.