San Lorenzo, Honduras
Recorren largas distancias a pie y se acomodan en cualquier pupitre improvisado.
Un tronco de un árbol, bloques, un balde plástico, unas llantas viejas o simplemente el frío piso de cemento son parte de los pupitres que les reciben a diario en los salones de clase.
Pese a la incomodidad que les genera permanecer encorvados durante la jornada escolar, ante la escasez de pupitres, los alumnos de este inmueble educativo permanecen atentos y realizan sus anotaciones diarias.
Y es que de esta manera 178 estudiantes del Centro de Educación Básica (CEB) José Cecilio del Valle, ubicado en la comunidad de La Cuesta, San Lorenzo, se forjan un futuro diferente al de sus padres.
Son alumnos que por el solo hecho de acudir puntualmente a clases merecen el cien por ciento, pero el Estado aún no se interesa por ofrecerles las condiciones pedagógicas que promueven debe privar en los centros educativos.
Roger Nahún Ochoa Gutiérrez, director del centro educativo, informó que la matrícula del centro escolar es atendida en dos jornadas.
“Para 50 niños no tenemos pupitres. La Secretaría de Educación en 2015 nos entregó 40, pero la matrícula ha crecido cada año”, manifestó Gutiérrez.
El centro educativo data de 1954 y en la actualidad tiene disponibilidad del servicio de Internet del Pueblo, pero no posee computadoras ni aulas para recibir este tipo de formación. “Nuestros niños llegan desde comunidades como Tempisque, Monteoscuro, Los Socios y El Obraje, algunos caminan más de una hora a pie para llegar al centro”, dijo el docente.
Alumnos pobres
Según el maestro, este año, junto con el resto de docentes (nueve en total), le tocó comprarles los útiles a varios niños del séptimo grado, pues aunque deseaban estudiar sus padres no habían logrado reunir el dinero para los materiales educativos.
“Tenemos niños que tienen útiles y uniformes, pero no les quitamos el entusiasmo y los dejamos que lleguen sin estos requisitos”, agregó.
San Lorenzo posee una matrícula de 10,720 alumnos, cifra que mantiene a esta comunidad en el segundo lugar por mayor cantidad de estudiantes a nivel del departamento.
En el municipio funcionan unos 83 centros educativos, de estos 67 son oficiales y el resto privados.
Según las autoridades de la departamental de Educación, en el departamento se requiere de nuevo mobiliario escolar debido a que un alto porcentaje ya dio su vida útil.