Denuncian abusos de Roosevelt Hernández por obligar a tropas y oficiales a donar sangre
Los soldados y oficiales por orden superior deben felicitar al jefe de las Fuerzas Armadas cuando cumple años, mientras que las mujeres marinos que se resisten a jugar fútbol son dadas de baja
- 28 de julio de 2025 a las 00:00
Tegucigalpa, Honduras.- Miembros de la base naval de las Fuerzas Armadas consideran un abuso de autoridad de Roosevelt Hernández, jefe de Estado Mayor Conjunto, obligar a los sodados y oficiales a donar sangre al Hospital Escuela. Este es uno de los últimos casos denunciado dentro de la institución castrense.
El reciente 30 de abril, el general de brigada Óscar Orlando Castillo Cáceres, director de Recursos Humanos del ente militar, le envió una nota al contralmirante, Austacil Hagarin Tomé Flores, comandante de la Fuerza Naval, ordenándole enviar efectivos de tropa y oficiales a donar sangre.
“Con instrucciones del señor Jefe del Estado Mayor Conjunto, General de División, Don ROOSEVELT LEONEL HERNÁNDEZ AGUILAR, respetuosamente me dirijo a usted, en ocasión de notificare y a la vez ordene a quien corresponda, que deberá enviar el día 05MAY025, veinte (20) efectivos de tropa entre Oficiales, Sub Oficiales, Tropa y Auxiliares para donar sangre O+ y O- en apoyo al Banco de Sangre del Hospital Escuela”.
Esto “con el objetivo de aumentar el inventario de sangre y brindar respuesta oportuna a las emergencias, ya que actualmente el banco de sangre se encuentra en niveles críticos, la cual dificulta la atención a los pacientes que acuden a dicha Institución”, dice la nota.
Por otro lado, un chat al que tuvo acceso EL HERALDO revela que la orden de Roosevelt es de carácter obligatorio. “Buenas noches mi capitán de corbeta, respetuosamente le reparo (reporto) que no hay personal voluntario para donar sangre”, le comunica el teniente de fragata Naul Hernández Ramos al capitán de corbeta Jorge René González Hernández.
La respuesta de González Hernández fue: “Hijo es obligatorio, agarre a los que están en el Estado Mayor”.
Ante, la denuncia de abuso de autoridad de Roosevelt Hernández, se le consultó al coronel Franco Lara, jefe de relaciones públicas del ente militar, si es política de las Fuerzas Armadas obligar a los soldados y oficiales a realizar actos contra su voluntad, a lo que él contestó: “Se hacen las campañas dentro de las unidades y se les pide que incentiven a la gente para que donen sangre. A nadie se le obliga”.
Otros abusos
También existen otros abusos en las Fuerzas Armadas que los soldados y oficiales tienen que soportar y cumplir, de lo contrario están expuestos a ser dados de baja deshonrosa o enviados a misiones a lugares remotos en el Atlántico.
En otro chat, un capitán de Fragata de nombre Norman Gerardo Cáceres Moreno le escribe a sus subalternos diciéndoles que “por orden superior hay que darle like a una página de Facebook y “felicitar a mi Gral Hernández ya que hoy está cumpliendo años”.
Asimismo, se conoció el caso de la marino Denia Rodríguez, quien el 26 de junio de 2025 fue dado de baja porque no aceptó jugar en el equipo de futbol de la Fuerza Naval, en un torneo de Tegucigalpa con equipos civiles.
Aprovechando de que las Fuerzas Armadas promueve el servicio militar voluntario y educativo, la joven ingreso a la Fuerza Naval en el 2023 y al estar asignada en la base en Amapala, en el Pacífico, se le dio autorización para que estudiara su educación media en un instituto de Nacaome.
En mayo de este año la llamaron del Estado Mayor Naval para que se incorpore al equipo de fútbol, pero al negarse a participar porque eso le implicaba perder sus clases, buscó el apoyo del contralmirante Tomé Flores, quien más bien terminó amenazándola diciéndole que el fácilmente podría mandarla en arresto, que estaba en su derecho.
Díaz después a Rodríguez le cayó una orden de ir a misión a Suan, ubicada en La Mosquitia, a donde solo mandan hombres y cuando se asigna una mujer siempre es una oficial. Tras desobedecer la orden de ir a Suan, ella también buscó el apoyo del departamento de psicología donde no la querían atender diciendo que desobedeció una orden del contralmirante.
Una vez atendida, una psicóloga le extendió una nota a Rodríguez diciéndole que no podía trabajar bajo presión y por lo tanto no puede seguir en la fuerza. Díaz después a la marino la mandaron a llamar y le dijeron que por orden del escalón mayor no podía seguir en la Fuerza Naval.
