Málaga, España
Una activista de los derechos de los animales saltó al ruedo de la plaza de toros de la ciudad española de Málaga ante miles de espectadores para consolar a un animal moribundo.
Posteriormente Virginia Ruiz fue forzada a abandonar el lugar y los puntilleros remataron al toro.
'Todavía estaba vivo antes de que le dieran la puntilla final en el cuello. Estaba llorando, tratando de mirar a la gente', dijo la activista, citada por el diario 'The Independent'.
'Quería darle amor antes de que abandonara esta tierra', dijo Ruiz, y confesó que algunas personas de la multitud le escupieron y la insultaron.
Además, la activista ahora se enfrenta a una multa de 7.000 euros por sus acciones.