La Secretaría de Seguridad a través de su portavoz Héctor Iván Mejía
descartó esta martes que se hayan extendido órdenes para darle seguimiento y vigilancia al
exdirector
de la Policía Nacional Ricardo
Ramírez
del Cid.
El vocero reaccionó ante la denuncia que hizo el general, quien se declaró víctima de persecución y vigilancia por un
subcomisionado
de Policía que habría recibido “órdenes superiores”.
Según Ramírez
del Cid, el
subcomisionado Daniel López
Flores -quien es investigado por el extravío de armas al interior de la institución policial- lo sigue a todas partes.
Al respecto, Mejía dijo que se comunicó con el
subcomisionado López
Flores y éste negó que esté haciendo labores de vigilancia y seguimiento.
López
Flores le habría explicado al subcomisionado Mejía
que ni siquiera “se ha unido a las actividades laborales porque hace tres semanas falleció su madre”.
Al mismo tiempo, el oficial señalado por
Ramírez
del Cid le aseguró que “no ha recibido ninguna orden por parte del director general de la Policía” Juan Carlos Bonilla.
El portavoz dijo que se analizarán ambas versiones sobre el caso. “Lo importante es establecer el enlace de esas dos informaciones y determinar mediante un trabajo
investigativo
quién tiene la razón”, enfatizó.
Ricardo
Ramírez
del Cid señaló al director de la Policía Nacional, Juan Carlos Bonilla como el principal sospechoso del crimen de su hijo
y sus dos guardaespaldas.
Óscar Ramírez El general también aseguro que desde las Fuerzas Armadas de Honduras y de la Policía fue que “me hicieron este gran daño”.
Tres fiscalías del Ministerio Público investigan el asesinato de Óscar Ramírez.
En las primeras diligencias se ha determinado que las investigaciones del caso han sido
contaminadas
por lo que el Ministerio Público no descarta pedir la suspensión del cargo del director policial.