Siempre

Una lectura a la vida con poetas europeos en el Festival de Los Confines

Adrian Grima (Malta), Zoë Skoulding (Gales), Christos Koukis (Grecia) y James Byrne (Inglaterra) se presentaron en la UPNFM de Gracias para hacer un recorrido por su poesía y sus motivaciones
25.05.2024

GRACIAS, LEMPIRA.- Dondequiera que se lea o escuche, en el idioma que haya sido escrita o traducida, la poesía es la visión sensible de la vida.

La musicalidad de la poesía no conoce de barreras idiomáticas, pero cuando se entiende, cuando la palabra dicha o leída ha sido comprendida, se ha roto cualquier barrera que pareciera erguirse para impedir su mensaje.

En el tercer día del Festival Internacional de Poesía Los Confines el mensaje llegó, desde Malta, Grecia, Gales o Inglaterra, y entendimos que por muy diferentes que sean las culturas el ser humano siempre estará conectado en sus sentires y vivencias.

Consolidar la poesía, el eje del Festival de Los Confines para 2025

La sede de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM) convocó al público a una lectura de poesía con los poetas europeos Adrian Grima (Malta), Zoë Skoulding (Gales), Christos Koukis (Grecia) y James Byrne (Inglaterra).

Los poetas leyeron su poesía en sus respectivos idiomas, y la traductora estadounidense Katherine M. Hedeen y el poeta cubano Víctor Rodríguez Núñez fueron los encargados de hacer las lecturas en español.

Tres poemas, cuatro autores

Cada poeta leyó tres poemas, los cuales están incluidos en los libros que publicó el Festival Internacional de Poesía Los Confines para esta edición.

Zoë Skoulding inició la lectura. La poeta y crítica literaria galesa ha sido traducida a 30 idiomas, y su último poemario, que además es el sexto, ha sido multipremiado.

En Los Confines leyó pero también compartió las motivaciones de su obra, como el poema que escribió antes del Brexit y que aborda las relaciones entre los países y espacios, o el ejercicio de escritura que inició con caminatas por Gales con el mapa de otra ciudad de Europa para luego sentarse a escribir.

Astrolare

Caminaba por el jardín

bajo planetas y farolas

entre farola y

flor colgada

entre elementos

entre las calles que convergen

una rosa no sabe que es una rosa

la ciudad no sabe que es una rosa

la ciudad se abrió

me desdoblé

a través de líneas simétricas

lo oculto

asterión

flor estrella

perforó lo oscuro

vida de su entramado de raíces

extendidas sobre el cielo

mientras los satélites florecían

alrededor del mundo.

El poeta, traductor y académico inglés James Byrne leyó tres poemas, inició con uno que escribió cuando entró en vigencia el Brexit, y finalizó con un poema de amor.

Para Byrne, la poesía es como la música sin instrumento, porque el instrumento del poeta es la voz.

Ya es hora

Con una mueca entonces, irse sin

inhalar el sol. Pero cumplí mi condena,

tragué las llaves del carcerlero en la boca.

Ahora se levanta el signo del fuego, son solo los viejos

que gritan entre las llamas. No soy como ellos.

Cuando cierro los ojos se abren en ti,

tan brillante como la Puerta del Sol. Campanadas.

Las diez de la mañana. Silencio. Silencio.

La lectura continuó con el poeta griego que se perdió durante tres horas en el centro de San Pedro Sula, buscando unos libros que olvidó y que nunca encontró.

Christos Koukis ha sido uno de los descubrimientos del Festival de Los Confines, y no porque venga iniciando su trayectoria (ya ha publicado siete libros), sino porque si no fuera por espacios como este sería aún más complicado llegar a la poesía griega.

Su poesía social nos indica lo que se mencionaba al principio, las experiencias del ser humano se repiten como ciclos interminables, no importa si se está en Honduras o Grecia. Sucedió así con la poesía de Christos, que se sintió tan cercana como si la hubiera escrito en Honduras.

Ventajas de afrontar la escasez de agua

”¿Dónde aprendiste a nadar?”

mi sobrina me estuvo preguntando toda la tarde

“¿En qué mares?”, insistió

Fingí que no podía recordar le hice creer que fue hace años

¿Qué iba a decir?

¿Qué hacía poco había aprendido a nadar

en los pequeños estanques de tu nuca

que se forman cuando te beso?

Si lo dijera

ni un niño creería

esa verdad

La poesía de Malta se acercó a Honduras desde la obra de Adrian Grima. El autor ha publicado su obra en Argelia, Egipto, Alemania, India, Irlanda e Italia... y ahora en Honduras.

El poeta cubano Víctor Rodríguez Núñez celebró el hecho de tener a Grima en Honduras y ser leído en español. “Sin traducción no hay cultura, no estaríamos en este evento sin traducción”, dijo Rodríguez.

Grima retomó lo que habían mencionado sus colegas, las relaciones entre países, y lo recordó con su poema Roazemarynbled, donde hizo referencia a la relación entre Malta e Irlanda en la producción de papas. “La papa sin romero/ es como las horas sin compañía./ Así le dijo,/ horas sin compañía./ Se sonrojó, sin saber por qué,/ quiso asar las horas,/ dejarlas crujientes,/ o ponerlas a fuego lento,/ saltearlas”.

Con su poema “El legado del padre”, Grima deja registro del ataque que sufrió su casa, el poeta había publicado un libro de poemas sobre la migración, y a causa de eso su residencia sufrió la violencia de la intolerancia... “eso también es Europa”, dijo.