San Pedro Sula, Honduras.- El médico y exviceministro de Salud, Roberto Cosenza, aspira a llegar al Congreso Nacional con un propósito claro: contribuir a la defensa de la democracia hondureña y promover políticas públicas en salud que trasciendan gobiernos.
“Debemos escoger si queremos vivir en la Honduras que nos están ofreciendo algunos partidos, en una Honduras comunista o socialista, o en una Honduras donde cada cuatro años podamos elegir libremente y donde la libertad de expresión continúe”, expresó Cosenza durante su participación en el programa Hablemos de Política.
Del hospital a la política
Graduado como médico en Cuba, Cosenza asegura que su paso por la isla no lo convirtió en simpatizante del comunismo. “Todo lo que ofrecen es mentira”, afirma con firmeza.
Tras su regreso a Honduras en 2011, se especializó en medicina familiar, cardiología y enfermedades infecciosas, desempeñándose como médico asistencial en el hospital de Puerto Cortés.
Su experiencia con pacientes con VIH marcó profundamente su vida profesional. “Conocí historias duras, como la de una niña que fue vendida a los seis años y terminó contagiada por su agresor. Esas realidades siguen ocurriendo”, lamentó.
Un Congreso que legisle, no que administre fondos
Cosenza considera que el Congreso Nacional ha perdido su rumbo y promete enfocarse en la función esencial del legislador: crear y fiscalizar leyes.
“El diputado no está para manejar fondos, para eso están las instituciones y ministerios que cuentan con presupuesto. Hoy el Congreso no cumple su papel de legislar en beneficio de la mayoría”, sostuvo.
El aspirante por la casilla 82 de Cortés propone fortalecer el presupuesto destinado a salud, garantizar el abastecimiento de medicamentos y mejorar la atención médica.
“Honduras necesita un hospital cardiovascular y un hospital de trauma en San Pedro Sula. Las enfermedades del corazón y los accidentes de tránsito son las principales causas de muerte”, afirmó.
Durante su gestión como viceministro de Salud, Cosenza fue parte del equipo que enfrentó la pandemia de covid-19, experiencia que considera uno de los mayores desafíos de su vida.
“El mundo estaba colapsado, pero nosotros ideamos estrategias y fuimos ejemplo. No cambiaría nada, trabajamos con amor y salvamos vidas”, recuerda.
Asegura que el departamento de Cortés fue el epicentro del virus y que su equipo logró coordinar esfuerzos que luego se replicaron en todo el país.
Cosenza también se refirió a la corrupción, tema que considera “una herida abierta” en el país.
“Hoy vemos diputados y ministros involucrados en casos de corrupción. La política no debe ser para enriquecerse. Si alguien piensa así, no debería estar en política”, enfatizó.
Añadió que el pueblo merece transparencia en el uso de los fondos públicos. “Yo fui viceministro y nunca manejé dinero. Mi labor fue técnica, con una hoja de nombramiento, sin presupuesto. Dios sabe dónde me quiere tener y de qué me aparta”, expresó.
Para Cosenza, su meta no es solo ganar una curul, sino “legislar por amor a Honduras”, apostando a leyes en salud, educación y empleo que trasciendan los periodos de gobierno.
“Teniendo salud, tenemos fuerza para trabajar. Por eso debemos luchar por políticas de salud sólidas y por oportunidades que den estabilidad a las familias hondureñas”, concluyó.