Tegucigalpa, Honduras.- Con la llegada de las lluvias al territorio, el zancudo transmisor del dengue prolifera, por lo que los casos de esta enfermedad podrían estar aumentando, sino se toman las medidas de prevención necesarias.
En lo que va de este año la Secretaría de Salud (Sesal) registra una reducción considerable de casos de dengue; hasta la semana epidemiológica 17 (del 20 al 26 de abril) se contabilizan un total de 5,220 casos sospechosos de dengue, según datos de la Unidad de Vigilancia de la Salud.
La cifra representa cerca de la mitad de los casos que se contabilizaron en los primeros cinco meses del 2024, cuando fueron 10,572 enfermos.
Del total de personas que han sido afectadas por el zancudo transmisor del dengue, Aedes Aegypti, este año, hay 3,968 que padecieron de dengue sin signos de alarma; 1,163 con signos de alarma y 89 graves, de acuerdo a datos oficiales.
Lamentablemente también se reporta este año la muerte de cuatro personas; tres de ellos menores de entre 5 y 14 años y una mujer en el rango de 30 a 39 años; los decesos se registraron en Ocotepeque, Cortés y Choluteca.
A pesar de la reducción de casos respecto al año anterior, la temporada de lluvia que ya comenzó ha hecho que los casos vayan en aumento; durante la última semana, a nivel nacional, se diagnosticaron a 410 personas con la enfermedad.
"El comportamiento ha sido menor al año anterior; sin embargo, como siempre hay unas regiones que tienen un comportamiento diferente al resto de regiones en el país, específicamente la región del Distrito Central, San Pedro Sula y Cortés", dio a conocer la Amy Tovar, jefa del programa de atención a las enfermedades transmitidas por vectores, de la Sesal.
Particularmente en el Distrito Central, las autoridades de la Región Metropolitana de Salud llevan registro de al menos 1,340 casos sospechosos de dengue.
De esos, cerca de 80 pacientes han tenido que ser hospitalizados por presentar complicaciones.
En el Hospital Escuela se reportan hasta la fecha 140 hondureños hospitalizados, la mayoría son entre los 5 y 17 años, además se han atendido 551 personas.
Mientras que en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) son más de 700 casos los que se han atendido a nivel nacional.
Proliferación de zancudos
Los médicos advierten que en los próximos días el vector puede aumentar en los hogares hondureños, causando más enfermos, sino se toman las medidas necesarias.
"Cuando empiezan las lluvias es cuando más empezamos a ver el incremento de vectores, por eso todos los solares baldíos, las zonas donde hay acumulación de basura que pueden contener agua se vuelven depósitos para el vector", agregó la doctora Tovar.
Desde antes del inicio de la temporada lluviosa las autoridades iniciaron el plan para la eliminación de criaderos de zancudos, con el objetivo de prevenir los casos y evitar que más hondureños se enfermen.
En ese sentido Tovar hizo un llamado a la población a ser parte de las acciones para eliminar al zancudo que transmite la enfermedad.
"La eliminación de los criaderos es lo principal; si tenemos el hábito del autocuidado es menos probable que podamos de desarrollar esta enfermedad, pero la medida que no tengamos la aplicación de las acciones estamos facilitando este tipo de enfermedades en nuestros hogares", apuntó.
Otros expertos señalan que de no tomar las medidas de prevención desde ahora, se podría presentar una situación igual a la del año 2024 cuando se registraron más de 177,00 casos y cerca de 150 fallecimientos.
En ese entonces Honduras, al igual que otros países de la región, reportó el peor brote epidémico de dengue, debido a la circulación en el territorio de los cuatro serotipos de la enfermedad.
Este año, las autoridades sanitarias explicaron que hasta el momento solo circula el serotipo 3, que es el que está en toda la región.
"Este es el serotipo que esta en toda la región de las Américas ahorita, nuestra hipótesis es que los casos que se están presentando son susceptibles que quedaron el año pasado; el mayor riesgo es que haya la introducción de un nuevo serotipo", indicó Tovar.
De llegar a ingresar al territorio otro de los serotipos, se corre el riesgo que las personas que ya se enfermaron se vuelvan a enfermar, pero esta vez tener mayores complicaciones.
