Tegucigalpa, Honduras. – Hasta el Congreso Nacional llegó la consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall, para presentar su renuncia, la cual será sometida a votación en el Legislativo para que se haga efectiva.
El retiro de Hall era una crónica anunciada, luego de que pusiera a disposición su cargo el pasado 16 de julio. La noticia generó diversas reacciones políticas, entre ellas la de Rixi Moncada, candidata presidencial por el Partido Libertad y Refundación (Libre), quien aseguró que Hall fue obligada a renunciar porque "quieren corrupción".
Moncada afirmó que la consejera reconoció que un pleno de solo dos miembros era ilegal, y que pretendían imponerle la validación de esa situación. “La querían obligar a cometer un delito más, además del que ya cometieron ellos al aprobar un TREP con solo dos personas”, dijo.
La aspirante a la presidencia señaló que la oposición busca “manosear los resultados” antes de su divulgación, lo cual calificó como una ilegalidad.
“No les gusta la legalidad, no quieren respetar la Constitución ni la ley. Hablan de eso, pero en la práctica no lo hacen. Quieren a alguien que les tape las sinvergüenzadas”, expresó Moncada.
Por su parte, el candidato a la presidencia por el Partido Liberal, Salvador Nasralla, culpó a Libre y Marlon Ochoa, representante del oficialismo en el CNE, por la renuncia de Hall.
Un panorama desalentador
Si antes de la renuncia de Hall la situación rumbo a las elecciones ya era crítica, ahora lo es aún más con todo el proceso que implica su salida del CNE.
La bancada del Partido Nacional ha dicho públicamente que respaldará al nuevo candidato propuesto por el Partido Liberal, Jhosy Toscano. Sin embargo, entre ambas bancadas apenas logran reunir 75 de los 86 votos necesarios, por lo que necesitarán el apoyo de Libre.
Además, Toscano tendría que renunciar a su candidatura para ser reelecto como diputado, ya que la ley no permite que una persona que aspira a un cargo de elección popular sea parte del Consejo Nacional Electoral.