Tegucigalpa, Honduras.- La noche de ayer lunes, desde la sede del partido Libertad y Refundación (Libre), militantes del mismo partido agredieron verbalmente al actual diputado, Gustavo Enrique González Maldonado, tildándolo de traidor y vendido por presuntamente vender credenciales a cambio de votos.
Lo anterior ocurrió antes de la rueda de prensa brindada esa misma noche por la candidata oficialista Rixi Moncada, quien afirmó que las elecciones generales del domingo aún “no están perdidas” para su proyecto político, a pesar de encontrarse a mucha distancia de los dos candidatos conservadores.
En videos compartidos en redes sociales se observa al diputado ingresando a la sede, donde una turba de militantes comenzó a gritarle, asegurando que había traicionado a su propio partido al "venderse al Partido Liberal", siendo él el coordinador departamental de campaña de Libre.
Parte de la base lo acusó públicamente de “vender credenciales” a cambio de beneficios electorales, señalándolo como uno de los supuestos responsables del colapso en las mesas de votaciones.
“¡Vendiste las credenciales por votos!”, le gritaban una y otra vez. “¡El pueblo no te quiere!”, “¡Andate con los liberales!”, dijeron enardecidos.
"Tavo vendido", "traidor", "ñángara", "hijo de p***" y "te vendiste con los liberales", fueron algunas de las consignas que los militantes lanzaron contra Gustavo, asegurando que durante su campaña nunca pidió apoyo por la candidata presidencial.
Los resultados preliminares adelantan que Gustavo González, podría ser uno de los 128 diputados que conformen el Congreso Nacional, con 29,668 votos.
Libre tras "derrota"
Por otro lado, Moncada, ante la visible derrota en los resultados, aseguró que “el bipartidismo nos impuso su trama electoral (...), adulterando el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) y la biometría”.
Señaló que a esa maniobra debe sumarse lo que describió como "la injerencia extranjera imperial y directa" de Trump, quien "a pocas horas de las elecciones anunció el perdón absoluto al narcotraficante Juan Orlando Hernández, capo sentenciado por ellos mismos como el co-conspirador principal que organizó un cartel del crimen para traficar droga a Estados Unidos".
Sostuvo que mantendrá sus posiciones al "no rendirse ", asegurando además que continuará “del lado del pueblo, con valores firmes en defensa de la patria libre, los principios de no injerencia, la soberanía popular, la independencia y la autodeterminación de los pueblos”.