Tegucigalpa, Honduras.- El candidato presidencial del Partido Democracia Cristiana, Mario “Chano” Rivera, expresó este martes que el expresidente de Honduras, José Manuel Zelaya Rosales, “jugó enchute” con el presidenciable Nasry “Tito” Asfura.
Lo anterior lo dijo en referencia a la aprobación del nuevo flujo del Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), aprobado por consenso por los consejeros del Consejo Nacional Electoral (CNE), el cual elimina la verificación humana.
“...Este último mes, el Partido Nacional convocó a una marcha masiva, gastaron millones en esa marcha para la verificación humana; el Partido Liberal fue a protestar al Congreso, hasta hubo heridos... y ahora resulta que la tal verificación humana pasa a segundo plano y es hasta el día siguiente, y en forma unánime, que sabemos que eso no va a pasar”, expresó Rivera.
El candidato presidencial aseveró que ahora se irá a las elecciones generales con las “reglas del juego de Libre. Libre ganó ayer en la parte legal porque se sustenta su punto de vista, el que había mantenido Marlon Ochoa”.
Según Rivera, a la consejera presidenta, Cossette López, se le vio desencajada la noche de ayer en conferencia de prensa, porque “probablemente había votado por algo en lo que no cree, pero fue obligada a votar”.
Superada la crisis
La crisis que tenía paralizado al Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras, debido a desacuerdos entre sus tres consejeros, fue resuelta ayer, por lo que a partir de hoy se retoma el cronograma electoral, que marcha con retraso a menos de cuatro meses de las elecciones generales del 30 de noviembre.
La crisis en el CNE se agudizó en julio, cuando la consejera Ana Paola Hall, representante del Partido Liberal de Honduras, segunda fuerza de oposición, anunció que ponía a disposición su cargo, de manera condicionada, por desacuerdos con los otros dos consejeros y amenazas contra su integridad y la de su familia.
El mayor desacuerdo era sobre el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), lo que provocó que, en principio, el consejero del gobernante Partido Libertad y Refundación (Libre), Marlon Ochoa, no asistiera a las reuniones del pleno que convocaba la consejera presidenta del CNE, Cossette López, del Partido Nacional, primera fuerza de oposición.
Con el acuerdo alcanzado, los tres consejeros se comprometieron, en una escueta declaración, a “trabajar de forma ininterrumpida” en el cronograma electoral.
El pleno de consejeros “aprobó por unanimidad” una enmienda especial para la ejecución “de los sistemas de transmisión de resultados electorales preliminares, escrutinio general, divulgación de resultados”, además de la adquisición de impresoras y otro equipo técnico para las elecciones generales, cuyo proceso es seguido de cerca por la comunidad internacional.
“Este acuerdo fue adoptado después de un amplio debate técnico, priorizando la existencia de las condiciones para el normal desarrollo de las elecciones generales, por lo que solicitamos a los partidos políticos y medios de comunicación no deslegitimar la decisión, que es producto de un diálogo institucional que prioriza los intereses del país, la confianza en el proceso, la paz social y la certeza técnica de los resultados”, añade el acuerdo.
Señala, además, que “el nuevo flujo del sistema TREP garantiza que toda la información transmitida por las Juntas Receptoras de Votos sea publicada íntegramente, aplicando las validaciones automáticas previamente autorizadas por el pleno de consejeros”.