Tegucigalpa

Los incendios y la urbanización ponen en riesgo al bosque

Cada año se dañan cientos de hectáreas de bosques en la capital. La mano criminal y el uso irresponsable de los recursos naturales han pasado factura a la naturaleza del Distrito Central

22.04.2021

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El verde de los bosques es un color que cada vez más se encuentra amenazado por la indiscriminada mano del hombre a través de incendios y urbanización.

La capital conmemora el Día de la Tierra con un evidente impacto del cambio climático y con áreas verdes que gritan por ayuda entre sus montañas.

En los alrededores del Distrito Central (DC) se ubican seis áreas protegidas, siendo La Tigra un parque nacional y el cerro de Uyuca, El Chile y Yerba Buena reservas biológicas. Además está Corralitos como un refugio silvestre y Carías Bermúdez como una área de usos múltiples.

Todos estos extensos bosques se comparten con municipios colindantes al Distrito Central.

LEA: JCI Honduras lanza proyecto 'Conciencia Verde' con ciencia para la humanidad

Ya dentro del casco urbano los capitalinos tienen al Parque Naciones Unidas El Picacho, el cerro Juana Laínez y el bosque de Triquilapa en la aldea Suyapa.

Estos zonas son de vital importancia para la vida de los capitalinos, por ser pulmones para la ciudad y fuentes de agua.

Pero las autoridades del Instituto de Conservación Forestal (ICF) lamentan que estas zonas sean indiscriminadamente dañadas por las personas.

“El 45% de la deforestación en el país sucede en estas áreas protegidas y esto se debe a la cobertura de los bosques, donde hay fuertes presiones de crecimiento”, expresó Alejandra Reyes, jefa de Áreas Protegidas del ICF.

TAMBIÉN: Alcaldía evalúa la eficacia de los proyectos viales en la capital

Amenaza

Por su cercanía con el casco urbano de la capital, es el Parque Nacional La Tigra la zona boscosa más propensa a sufrir daños en su entorno.

En este lugar la urbanización, los incendios forestales y el cambio de uso de suelo, en su mayoría la agricultura, causan que cientos de hectáreas sean afectadas.

“Es importante reforzar los compromisos en temas de vigilancia, pero también evitar los ilícitos ambientales”, recalcó Reyes.

En el caso de los bosques que tienen cientos de hectáreas, el principal problema son las personas que hacen el uso del cambio de suelo, es decir que una extensión del bosque pasa a ser utilizada para la agricultura, lo que conlleva realizar la tala de los árboles.

Durante este año se reportan 70 incendios que han dañado 1,063 hectáreas de bosque, teniendo una reducción del 70% la cantidad de siniestros en comparación a 2020.

ADEMÁS: En colonias más pobladas de la capital sigue la lucha por el desarrollo

Agua para vivir

En 1973 se declararon cinco subcuencas como zonas forestales protegidas, pensando en el futuro del suministro de agua potable para la ciudad.

Estas zonas son Guacerique, Sabacuante, Tatumbla, Río Grande y Río El Hombre.

La producción de agua en estos lugares se redujo drásticamente por los daños del gorgojo descortezador y sus efectos ya han pasado factura a los capitalinos con sequías y severos racionamientos de agua.

“En tiempo de verano se reduce el caudal de estos ríos, al no haber bosque el agua pasa de un solo, las represas se llenan y se pierde el agua. Otra amenaza son los incendios forestales porque reduce la capa fértil de los bosques, esto evita la filtración del agua” explicó Óscar Raudales, jefe del departamento de Cuencas y Ambiente del ICF.

Por su parte Jonathan Laínez, titular de la Unidad de Gestión Ambiental de la Alcaldía del Distrito Central, consideró que los incendios son el principal enemigo de los bosques.
Añadió que este año la meta es sembrar 150 mil árboles en la capital.

VEA: Lluvias inundan calles y provocan caída de muro en la capital de Honduras

Tags: