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2022, el brillante año de Maity Interiano: “Se puede luchar por los sueños y se pueden lograr”

Hija de padres hondureños, la talentosa periodista Maity Interiano conversa con EL HERALDO del camino transitado hacia el éxito y de otras facetas de su vida
02.03.2022

MIAMI, ESTADOS UNIDOS.- Desde muy pequeña ya soñaba en grande. Maity Interiano siempre tuvo claro lo que quería ser: una periodista. ¡Y lo logró! Salió de Honduras con maletas que cargaban anhelos y muchas ilusiones de estudiar en el extranjero. Tuvo la oportunidad y la fortuna de formarse en Elon University, en Carolina del Norte, Estados Unidos, que le permitió darse cuenta que no estaba equivocada.

El periodismo era lo que realmente la cautivaba y poco a poco iría descubriendo su pasión: contar historias. Allí inició a escribir la suya y tiempo después el mundo la vería resplandecer en la pantalla de Univisión.

Nació en Estados Unidos, pero sus primeros recuerdos de infancia empiezan a sus tres años de vida en suelo catracho. En Honduras se crio, en Honduras pasó su adolescencia y en Honduras tiene parte de su corazón. Sus padres son de Santa Rosa de Copán y sus abuelos siempre vivieron en esa ciudad y en Copán Ruinas.

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En algún momento de su vida iba en bicicleta a una escuela en La Lima, Cortés. En 2003 su familia se mudó a San Pedro Sula y ahí se graduó en la Escuela Internacional Sampedrana.

Con su dulzura, humildad, inteligencia, agregando una porción de sonrisas y desde la sala de redacción de Univisión, Maity nos compartió parte de su historia, su nueva etapa como co-presentadora del “Noticiero Univisión Fin de Semana”, nos confesó cómo afronta este reto profesional y hasta nos contó a quiénes le gustaría entrevistar en un futuro. Espera que este 2022 la siga sorprendiendo, que sea un año de muchas bendiciones y de mucho aprendizaje.

¡Conozca a Maity Interiano junto a nosotros!

¿Qué tal estás?

Muy bien, muy contenta de hacer esta conexión contigo.

Si viajamos por el tiempo hacia tu infancia, ¿cómo fue?

Los recuerdos que tengo presente siempre que voy a esos años de infancia es estar rodeada de mi familia. Yo soy la mayor de tres hermanos, pero por muchos años solo éramos mis hermanos varones y yo, entonces solo éramos tres. Mi hermana vino 18 años después, pero hemos sido una familia muy unida. Crecí rodeada de mucho amor por parte de mis abuelos y de mis padres.

¿De dónde surgió el seudónimo de “Maity” quién te lo puso o cómo fue?

Bueno, mi nombre es María Teresa Interiano y Maity surge porque mis primeros años de vida fueron aquí en Estados Unidos y María Teresa era un poco más largo y casi siempre a las María Teresa les dicen Maite, pero como estábamos aquí, pues mi mamá y mi papá se pusieron un poco creativos y me pusieron Maity.

¿Cómo inicia tu sueño de ser periodista?

Desde el momento en que me voy de Honduras con muchas ilusiones de estudiar en el extranjero, me siento muy agradecida y afortunada de que pude dejar mi país para venir a estudiar a Carolina del Norte. Había clases en las que yo era la única latina, pero con mucho orgullo te puedo decir que ha sido de los mejores años de mi vida, es una excelente universidad que ha preparado a grandes periodistas y me dio la oportunidad de realmente darme cuenta que eso era lo que me gustaba.

¿Cómo llegas a Univisión?

Primero tocando puertas y en ese entonces no eran puertas, literal, sino que mandaba faxes porque yo quería ver de qué manera podía trabajar aquí como pasante. Mandaba faxes todos los días, esperando que alguien lo viera hasta que un buen día en una conversación muy casual, la mamá de una amiga conocía a una amiga que trabajaba en Univisión y dije yo: ´esta es la manera en que yo puedo llegar ahí´ y así fue, insistí hasta que pude asegurarme de que alguien recibiera mi hoja de vida y la llevara al departamento de Recursos Humanos que estaban haciendo todas las contrataciones para las internships (pasantías).

Y así fue, entonces comencé como una estudiante haciendo su práctica en esta empresa, lo hacía en otro edificio en un programa de entretenimiento que ahora ya no está, pero fue el programa por el cual trabajé muchos años y también aquí con el departamento de noticias en el programa de investigación Aquí y Ahora. Entonces sí, fue como estudiante, como niña nueva conociendo y aprendiendo.

Sos una de las personalidades más destacadas de Univisión, ¿qué representa esto para vos?

¡Ay, muchas gracias! Lo tomo con mucha responsabilidad, con mucho agradecimiento y con ganas de hacer las cosas bien. No solo por los logros que pueda yo obtener. Por la satisfacción de mi familia también, porque todo lo que a mí me pasa, bueno y malo, lo compartimos mucho en familia, pero también para esas próximas generaciones que vienen, que vean que se puede trabajar duro, que se puede luchar por los sueños y que se pueden lograr esos sueños y que el trabajo se tiene que hacer impecable.

Entonces, cuando me dices algo como lo que me acabas de decir, es una gran responsabilidad... Así lo tomo, con las ganas de seguir haciéndolo bien para mí y para el resto de las personas que vienen y ven con mucho respeto esta carrera.

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Tu experiencia siendo hondureña en la TV en EEUU... Diez años trabajando en “Despierta América” y ahora co-presentadora del “Noticiero Univisión Fin de Semana”, ¿cómo te tomás ese desafío?

Con mucha gratitud, con mucha responsabilidad, con muchas ganas de seguir aprendiendo. Después de diez años, sí, me toca comenzar un nuevo capítulo y no es fácil, los cambios a veces le dan a uno un poco de temor... Ha sido muy gratificante la manera en que me han recibido, tengo un excelente compañero (Félix de Bedout), es un excelente periodista que tiene una trayectoria intachable, así que solo puedo aprender de él. Lo asumo así con muchas ganas de seguir aprendiendo, leyendo y preparándome para todo lo nuevo y lo bueno que viene.

Cuéntanos de tu debut en este nuevo reto profesional...

¿Cómo es un día de trabajo en la vida de Maity Interiano?

Todavía estoy ajustándome, porque los días van cambiando, pero las noticias como vos lo sabes, no paran. A pesar de que el noticiero es a las 6:30 pm, arrancamos desde muy temprano con una llamada editorial donde se conectan todos los corresponsales de las diferentes oficinas y corresponsalías que tenemos a nivel nacional e internacional y desde ahí vamos viendo cuáles son las noticias que van haciendo titulares...

Yo me levanto temprano, no tan temprano como antes. Ahora ya disfruto de mi café en mi casa, leo y veo las noticias, aprovecho en la mañana, después de esa llamada, a hacer ejercicio, ya estoy comiendo como que en horario normal, ya estoy volviendo a encontrar el gusto de cocinar, porque antes era lo que encontrara y me iba con mi yogurt o comía en la calle.

A las 2:00 pm, cuando llego aquí a la sala de redacción de Univisión, comienzo a leer, a ver los reportajes que han preparado los diferentes corresponsales, es mucha lectura, es mucha preparación... Hacemos breves, hacemos headlines (titulares) y aunque suena como que ‘ay, desde las 2 para las 6’ el tiempo se va volando rápido y más ahora en estos días con tanta información de todas partes. Me siento con los redactores a revisar lo que ellos han escrito, a adaptarlo, cambiarlo, porque todavía estamos en ese proceso de ellos saber mi estilo y yo el de ellos. Y cuando menos vengo a ver ya es hora de comenzar el noticiero y se acaba en un abrir y cerrar de ojos...

A las 7 pm tengo un break (descanso), voy a comer, para seguir en la jornada de las 11:30 de la noche. Entonces volvemos a hacer todo nuevamente, pero con mucho gusto, en esta etapa estoy volviendo a leer y aprender tanto, que no es que no lo hacía antes, simplemente que ya me lo sabía y me lo conocía tan bien que era mucho más fácil. Ahora siento como que estoy de regreso en la escuela, volviendo a tomar notas y esa sensación me gusta mucho.

Si no fueras periodista, ¿qué te hubiera gustado ser?

Es difícil porque siempre he querido ser periodista, quizá... No sé, algo como maestra o psicóloga. Me encantan los niños y la educación, por eso te digo que quizá profesora.

¿Qué es el periodismo para Maity?

¡Uy! Primero, es mi pasión y es una gran responsabilidad; es un don poder contar historias con mucho respeto, con mucha sensibilidad, con veracidad.

¿La persona más difícil a la que has tenido que entrevistar?

¡Wow! Qué buena pregunta... Creo que hace muchos años, cuando estaba comenzando, quizá entrevistar a Nicolas Cage (actor, comediante, director y productor estadounidense) fue difícil. Primero porque no tenía la experiencia que tengo ahora y después porque... Quiero pensar que él estaba teniendo un mal día, porque llegó y contestaba ‘sí, no, sí, no’ y yo estaba como ‘qué está pasando’.

Yo necesitaba esa entrevista y simplemente no estaba teniendo la respuesta y en ese instante yo pensaba: ‘será que algo dije, algo hice, algo ando puesto que lo incomodó’ y realmente no fue así, simplemente fue que él estaba teniendo un mal día y gracias a Dios fue temprano en la carrera, porque me di cuenta de que esa es la magia de nuestra profesión, que nunca sabes con lo que vas, uno lee y se prepara, y segundo que las personas que uno entrevista son personas como nosotras.

Podrá ser un presidente o podrá ser la persona que está recogiendo la basura, pero al final del día tienen los mismos problemas, con un poco de diferencia que nosotros y esa es la magia; poder llegar y conectar con esa persona a cualquier nivel, en cualquier idioma y bajo cualquier circunstancias.

Fue una lección un poquito desagradable, porque lo admiraba muchísimo y porque fue difícil después hacer una historia con ‘sí, no, sí, no’, pero me enseñó muchísimo a no tomarlo personal, a buscarle la manera y sacar una historia. Siento que han sido muchas más las experiencias lindas que esas que son un poco desagradables, pero que te enseñan mucho.

¿A quién te gustaría entrevistar en un futuro?

¡Uy! Ahora creo que tengo toda una lista de personalidades que quisiera entrevistar. Me gustaría tener una conversación con la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, creo que es una entrevista muy importante para mí como hondureña, como mujer. Escuchar más allá de su campaña política y su discurso inaugural.

Siempre hay líderes mundiales a quienes uno quisiera entrevistar, a los presidentes del país, al presidente Joe Biden, al papa Francisco. Y creo que ahora no hay límites para lo que yo quisiera entrevistar, pero más allá de una lista de famosos, celebridades, dignatarios, quisiera contar más historias de las personas comunes y corrientes, personas como yo, como vos, que luchan, que son innovadores, que están haciendo cosas diferentes...

¿Cuál ha sido la cobertura periodística que ha marcado tu vida?

Cubrir la caravana y la frontera... Hay un antes y un después. Te lo digo de manera personal y te lo digo de manera profesional. En la caravana conocí a un niño llamado Snyder, él recién había cruzado la frontera de México-EEUU a través del río; estaba asustado, temblando porque hacía frío, estaba como desubicado, quería ver a su mamá, tenía mucho tiempo de no verla.

Yo lo iba entrevistando y la gente lo iba viendo conmigo. Todo ese elemento sorpresa yo creo que la gente lo vivió y te digo que para mí fue muy importante, porque el poder de esta entrevista, su mamá supo que él había cruzado la frontera porque lo vio en Univisión, porque lo vio en “Despierta América”. Ese es el poder del periodismo, pero a la misma vez, a mí me trajo de regreso, literalmente, con los pies sobre la tierra y decir: ‘y esta es la realidad que viven millones de personas a diario en busca de un sueño americano’.

¿Un periodista debe hacer las mejores preguntas o conseguir las mejores respuestas?

¡Wow, qué buena pregunta! Bueno, es que si tienes las mejores preguntas vas a recibir las buenas respuestas. Yo creo que un periodista tiene que saber escuchar y estar pendiente de los detalles. Y sí, tenemos que prepararnos, tenemos que saber y averiguar lo más que podamos, tener una lista de preguntas, pero también tener esa capacidad de saltarnos de la pregunta 3 a la 5 o la 7 o escuchar y yo creo que ahí es cuando salen las mejores respuestas.

Desde tu punto de vista, ¿qué le falta a la TV hondureña?

Como tengo tantos años viviendo en EEUU, no veo la televisión hondureña todos los días, entonces no me atrevería a decirte qué es lo que le falta, yo te puedo decir qué es lo que tiene; y lo que yo sé es que tiene mucha gente talentosa.

¿Qué te llena de impotencia?

La injustica. Ver las situaciones y las historias de la gente migrante da impotencia, frustración y tristeza.

Cambiando de tema... ¿Cómo te ha tratado la pandemia del coronavirus?

Han sido dos años de mucha experiencia. Creo que han sido dos años muy importantes. Profesionalmente me tocó reinventarme, descubrí lo que era transmitir a través de la computadora, hice de mi balcón el balcón de las orquídeas, no dejé de trabajar, aprendí a ser paciente. Me dio covid hace un año y no fue fácil, no estaba vacunada porque todavía no me tocaba y fue mucho tiempo de reflexión, tuve varios síntomas, gracias a Dios no fue nada grave, pero sí ha sido un momento de revaluarse y replantearse cuáles son las prioridades de uno en esta vida.

¿Qué lecciones te ha dejado el covid?

Me ha enseñado a ser paciente, a disfrutar el día a día, a vivir en gratitud. Yo te digo que la pandemia para mí fue un momento de una pausa obligatoria a muchas cosas, pero también tiempo para descubrir otras, desde mi amor por las flores hasta poder hacer tiempo para hablar con mis abuelos.

La pandemia me acercó mucho a mi abuelo, él estaba solito en Santa Rosa y todas las tardes hacíamos FaceTime y yo creo que si yo hubiera estado en mi acelere de todo eso, sí me hubiese preocupado como lo hago siempre, pero no hubiese habido esa conexión y fue muy especial para mí. Mi abuelito falleció en noviembre del año pasado, pero te puedo decir que disfruté tanto a mi abuelito, que a pesar de que no lo vi tan a menudo por la distancia y la pandemia, lo pude disfrutar y yo agradezco mucho eso.

¿Qué opinás de la migración vista desde nuestro país?

Es una realidad que se vive. Hasta no conversar con las personas que deciden ir en la caravana es que uno entiende realmente la desesperación que viven estas familias. A mí me partía el alma ver muchachitas de 15 años en esta travesía, porque eso es lo que es la caravana migrante, desesperadas por búsqueda de un mejor futuro.Yo espero que vengan años mejores, que tengamos un buen liderazgo y que pueda haber esa diferencia.

AQUÍ HABLAMOS DE TODO UN POCO...

¿Cuál es tu libro favorito?

Tengo varios libros favoritos, pero te puedo decir que ahorita estoy leyendo uno que se llama Atomic Habits (Hábitos atómicos), que se basa en ese principio de hacer cambios pequeños para ver grandes resultados. Este es un libro de ayuda y de crecimiento y me lo entregaron el día que empecé esta nueva etapa y creo que viene muy bien, porque se trata de pequeños cambios que luego se convierten en grandes resultados.

¿Cuál es tu mayor miedo?

Lo más importante para mí es mi familia y pensar en la ausencia de ellos o no tenerlos en mi vida me da miedo, me da tristeza más que miedo. El no tener ese amor incondicional de la familia es quizá mi mayor temor.

Termina la frase: La vida es demasiado corta como para...

Para quejarse.

¿Cómo fue la experiencia de entrevistar a Luis Miguel?

Oh my God! (¡Ay, mi Dios!) Era una bola de nervios, ya ni me acuerdo lo que le pregunté, pero sí, era bien temprano en mi carrera donde me daba cuenta que los nervios se apoderaban más de mí, entonces sí, quedé casi como en shock. Pero ahora, unos años después, me gustaría tener la oportunidad de sentarme y conversar con él. Está en la lista también.

Dice una de tus publicaciones en Instagram: “Que todo lo que un día lloraste, se te multiplique en sonrisas”, ¿cuándo fue la última vez que lloraste y por qué?

¡Uff! Ehhhh... La última vez que lloré fue en noviembre del año pasado y fue la pérdida de mi abuelo. Es inevitable el dolor que uno siente cuando un ser querido ya no está con uno y sí, ese fue un día muy difícil para mí y para mi familia, pero se ha multiplicado y se sigue multiplicando de tantas maneras su presencia, su amor y todo lo que él me enseñó.

¿Soñás con ser mamá?

Cien por ciento.

¿Qué es lo más bonito que has hecho por amor?

¡Todo! Yo trato de vivir mi vida con eso, con el lema de “por amor”. Tengo un anillo que dice love (amor), tengo una cadenita que dice love (amor) y yo creo que cuando uno hace las cosas con amor, los resultados son diferentes. Y amor no solo es de pareja, amor es hacerlo de corazón.

Si pudieras hablar con tu yo del futuro, ¿qué le preguntarías?

Más que todo le diría que disfrute, que no se enfoque tanto en lo que viene, sino que disfrute el hoy, que sea feliz, que confíe en ella, que confíe en que las cosas que están pasando son las que tienen que pasar.

Si encontraras una lámpara mágica, ¿cuáles serían tus tres deseos?

Uno, bueno que por fin llegara ese hombre a mi vida con el que haría mi familia, segundo convertirme en madre y tercero... Me encantaría irme de viaje con toda mi familia.

QUÉ PREFIERES...

¿Viajar al futuro o viajar al pasado?

Vivir el presente.

¿Volar o ser invisible?

Volar.

¿Tomarte un café o una copa de vino?

¡Uy, un vino!

¿Un café con azúcar o recordar un viejo amor?

Un café con azúcar, jajaja.

Nos despedimos de este espacio con algunos nombres que evocan sentimientos y diferentes expresiones de nuestra entrevistada...

El balcón de las orquídeas: Felicidad

Univisión: Mi casa

Honduras: Mi hogar

Neida Sandoval: Una líder

Xiomara Castro: Cambio

María Elena Bottazzi: Inteligencia

Félix de Bedout: Compañero

Sirey Morán: Belleza y sencillez.

Juan Orlando Hernández: Expresidente

Aeropuerto: Segunda casa

Satcha Pretto: Mejor amiga

EL HERALDO: Un diario líder que siempre me ha apoyado y con el que estoy agradecida.