TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Carteras de diferentes estilos y tamaños; bolsos, canastas y sombreros para hombres y mujeres, con finos acabados, son el sueño hecho realidad de Tania Cardona. La hondureña emprendedora llegó hace un año a Santa Bárbara en busca de un bolso con material que identificara a la mujer hondureña, pero lo que encontró no llenó sus expectativas.
Fue en ese momento que a Tania, acompañada de su padre Juan Ángel Cardona, se le ocurrió hacer algo diferente a lo tradicional y que fuera de utilidad para las mujeres, pues solo había observado productos elaborados a base del arte lenca, garífuna y tolupán. Fue cuando pensó en transformar los petates en carteras.
Como todo proyecto, el inicio no fue nada fácil. Tania recibió el apoyo de su padre al igual que de su esposo Alfonso Gallardo, pues solo contaba con un capital de cuatro mil lempiras para impulsar el proyecto.
Los artesanos de Santa Bárbara no tenían toda la materia prima, por lo que les enviaba la tela para los forros, broches y las etiquetas.
Inicios
La elaboración de los primeros modelos fue en Santa Bárbara y fue supervisada por ella misma, pues lo que pretendía era que las prendas se realizaran con acabados de calidad para ser comercializados.
Al tener los primeros artículos, lo que seguía era el nombre de los productos, por lo que luego de varias discusiones, decidió denominarles “Petate”, incluido el nombre de Tania Cardona como marca original.
Con el paso del tiempo, a los productos elaborados de petate, Tania les ha ido incorporando otros accesorios, entre los que se encuentra la madera, las cadenas y el bambú, aparte del cuero que era el principal accesorio.
Además de eso, a las carteras les ha incorporado los chongos y la etiqueta de petate, lo que ha hecho que se convierta en un éxito debido a que los productos se pueden utilizar con diferentes combinaciones de ropa.
El primer proceso de las carteras, bolsos y sombreros se desarrolla en Santa Bárbara y los acabados se realizan en el taller de la mujer emprendedora. Desde el seno del hogar se distribuyen los diferentes productos a los clientes, que son el fin primordial de esta dama innovadora.
Las prendas son de fibra en tule natural (nombre genérico de varias especies de plantas de tallo largo, con cuyas fibras se tejen petates y asientos de silla) y también pueden ser de tule pintado.
También utiliza palma natural y palma pintada a base de añilina.
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Clientes
También elabora finos sombreros a base de junco, a los que les pinta paisajes. Entre las prendas que más vende Tania Cardona están las carteras tipo sobre al igual que las cruzadas o llamadas bandoleras, pues los clientes las adquieren para regalos y enviarlos al extranjero.
La primera dama Ana García de Hernández es una de sus clientas. Para la celebración del 15 de septiembre del año anterior, Tania le confeccionó una cartera tipo sobre y fue personalizada. “Esta cartera estilo sobre fue hecha a mano especialmente para ella”, detalló Tania con una enorme sonrisa.
“He tratado de darle un acabado diferente a las carteras, ya no tienen la típica tela y los broches, por lo que trato que sea una cartera que se pueda utilizar a diario”, comentó.
Al principio no fue fácil, pues al trabajar con las mujeres artesanas de Santa Bárbara empezó a ver las deficiencias que tenían al elaborar los productos, pues lo que hacían no tenía la calidad requerida.
Las personas que compran sus productos piden diseños muy coloridos, de esos que resaltan y eso es algo que ha gustado mucho a los clientes. Tania piensa incorporar detalles de madera acabada a las carteras de los diferentes estilos, con eso impulsará el trabajo extra de los carpinteros.
Los productos “Petate” tienen precios accesibles. Una cartera cuesta desde 400 lempiras en adelante, los bolsos grandes desde los 1,200 lempiras y los sombreros para hombre desde 400 lempiras.
Tania Cardona emplea a diez personas de manera directa y a corto o mediano plazo espera extender el personal que le colabora.
