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El síndrome del nido vacío, un proceso superable

Este sentir incide con más fuerza en aquellos padres que mantienen más contacto con sus hijos la mayor parte del tiempo

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25.01.2019

Tegucigalpa, Honduras
Los hijos son motivo de satisfacción para los padres, pero también de preocupación cuando llega la hora de marcharse de casa.

Los estudios, realización de sus vidas personales o el simple deseo de independizarse son algunos motivos por los que los hijos dejan el hogar.

Sea cual sea la razón, lo cierto es que los padres pueden llegar a experimentar el síndrome del nido vacío, ¿en qué consiste?, el psicoterapeuta en parejas Antonio Escobar nos lo explica.

El síndrome del nido vacío son los sentimientos de tristeza, soledad y abandono que pueden experimentar los padres cuando los hijos dejan el hogar. En relación a los hombres, las mujeres son más susceptibles a tener estos sentimientos.

No es un trastorno, sino una situación que puede suceder durante este momento de transición.

Existen estudios que demuestran que la calidad de la relación entre el padre e hijo se encuentra directamente relacionada a la gravedad del síndrome. Una buena relación entre los padres e hijos permite que la gravedad sea leve y más fácil de superar.

De igual forma, una relación conflictiva y hostil puede causar sentimientos negativos más severos en esta etapa de transición.

Consejos
Como todo en la vida, este síndrome requiere de un proceso que en algunos casos puede ser lento para superarlo, para ello Escobar tiene algunos consejos: es recomendable que el tiempo y la energía que se dedicaba a los hijos puedan ser redirigidos a otras actividades e intereses como un hobby o un nuevo negocio.

También es importante adaptarse al nuevo rol como padre que tendrá en la vida de su hijo. Ahora que el hijo(a) es independiente se enfrentará a nuevos retos y situaciones en las cuales la orientación y apoyo de los padres puede ser muy importante.