Es la temible premonición de los científicos ante el incremento de las temperaturas en todo el territorio nacional. Y es que un estudio del Banco Mundial sobre el tema nos expone las críticas condiciones climáticas que arrastra el país y los cambios que se prevén en el futuro cercano.
El panorama es sombrío. Entre 1901 y 2021 el país experimentó una subida de temperaturas promedio de 1.01 grados Celsius y los análisis de los datos existentes proyectan un aumento promedio de 1.69 grados Celsius para finales del presente siglo, de 2023 a 2100.
Nabil Kawas, exdecano de la Facultad de Ciencias de la UNAH, explicó a EL HERALDO que la variación de las temperaturas en el territorio nacional dependerá de la zona, pues los análisis les hacen proyectar que hay puntos geográficos que tendrán un mayor impacto, que es el caso del departamento de Gracias a Dios, Olancho, El Paraíso, Colón y Comayagua, donde los aumentos irían arriba del promedio de lo establecido en la Convención del Cambio Climático de París de 2015, de 1.5 grados, es decir que tendrían una variación de 1.75 grados Celsius.
Fue enfático al señalar que en las zonas donde las variaciones de temperatura superen la media de 1.5 grados, la población tendrá que adaptarse o morir, porque las altas temperaturas ponen en peligro la vida humana, la vida animal, la producción y la seguridad alimentaria.
La situación es seria y nos obliga a todos como sociedad a reflexionar sobre las acciones urgentes a tomar para no llegar a los escenarios planteados.
Ya, en estos momentos, las temperaturas son insoportables, incluso en comunidades que tradicionalmente se les recuerda por sus climas frescos, a pesar de lo cual como personas seguimos realizando acciones que no abonan a mejorar las condiciones climáticas, como la permanente destrucción de nuestros bosques, fuentes de agua y reservas naturales.