Tegucigalpa, Honduras.- Ana Paola Hall, consejera presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) realizó un llamado contundente a las Fuerzas Armadas y al jefe del Estado Mayor Conjunto, Roosevelt Hernández, en el marco de las elecciones generales 2025.
La abogada recordó a la institución castrense cuál es su función en el proceso electoral e instó a no salirse de sus facultades constitucionales.
"En sus manos está hoy dirigir la constitucionalidad por la senda democrática y de respeto a la Constitución que, entre otras cosas, establece en temas electorales, se encuentran a la disposición del CNE y que como institución apolítica y no deliberante deben respetar la voluntad de nuestro pueblo", dijo Hal directamente a Roosevelt Hernández, el jefe militar que ha enfrentado numerosas críticas por sus declaraciones previas en las que ha demostrado un comportamiento cuestionable, más orientado a lo político que a su rol de garantizar elecciones democráticas y soberanas.
Al resto de militares, la presidenta del CNE les dijo: "Miembros de Fuerzas Armadas, agradecemos su labor en el transporte, custodia y vigilancia en el envío del material electoral, esperamos que sigan cumpliendo la Constitución al pie de la letra en su retorno".
¿Por qué ha sido cuestionado Roosevelt Hernández en las elecciones?
El jerarca expresó semanas atrás su deseo de obtener copias de actas electorales a nivel presidencial para cotejarlas, algo que no está dentro de las atribuciones permitidas a los militares.
“Respetuosamente, solicitamos que el CNE proporcione a las Fuerzas Armadas copia de las actas de cierre del nivel presidencial, exclusivamente con fines institucionales de verificación del resguardo y custodia del proceso”, señala el documento enviado al CNE.
Numerosos sectores nacionales y extranjeros se pronunciaron preocupados ante esta inusual solicitud. Esto generó un clima de miedo e incertidumbre previo al proceso.
El artículo 272 de la Constitución establece que las Fuerzas Armadas únicamente deben garantizar la custodia, transporte y vigilancia de los materiales electorales, así como la seguridad del proceso electoral. Además, subraya que la institución debe mantenerse apolítica, obediente y no beligerante.