Ulisses, un sepulturero testigo de tragedia del Covid-19 en Amazonía
- El nuevo coronavirus colapsó el sistema de salud de Manaos, la capital del estado brasileño de Amazonas, triplicando el número diario de decesos. Fotos: AFP. 10/05/2020 - 04:051 / 15
- 'Cuando comenzó el aumento de entierros me asusté, ahora ya me acostumbré, siento que disminuye poco a poco. Solo espero que esto pase pronto', dice Ulisses a la AFP en el cementerio público Nossa Senhora Aparecida de Manaos. 10/05/2020 - 04:052 / 15
- El promedio diario de muertos en la ciudad de 2.1 millones de habitantes pasó de 30 -antes de la pandemia- a un centenar. Manaos ostenta así el mayor índice de mortalidad de una capital de Brasil por coronavirus, con 6,034 contagios y más de 600 muertos hasta el viernes. 10/05/2020 - 04:053 / 15
- Con la llegada de Covid-19, Ulisses, de 52 años, tuvo que hacer cambios radicales en su rutina: trabaja más horas, debe usar equipo de protección para evitar contagiarse y toma todos los cuidados necesarios para no llevar la enfermedad a su casa. 10/05/2020 - 04:054 / 15
- 'Tengo miedo de llevar la enfermedad dentro de mi casa, trabajo en un área de gran riesgo de contaminación', afirma Ulisses. 10/05/2020 - 04:055 / 15
- Su hermano Hércules, de 53 años, sospecha que tiene síntomas del virus y ahora se saludan a través del muro que separa sus casas.
10/05/2020 - 04:056 / 15 - Brazilian Ulisses Xavier, 52, who has worked for 16 years at Nossa Senhora cemetery in Manaus, Brazil, rests at his house after his shift on May 7, 2020, amid the new coronavirus pandemic. - Xavier works 12 hours a day and supplements his income by making wooden crosses for graves. The cemetery has seen a surge in the number of new graves after the outbreak of COVID-19. (Photo by MICHAEL DANTAS / AFP) 10/05/2020 - 04:057 / 15
- Al final de un día largo, Ulisses vuelve a su hogar en bicicleta y cumple un ritual sagrado de limpieza. 'Llego a casa, me saco la ropa, entro al baño, me ducho y lavo mi ropa. Sólo después de eso, voy a abrazar a mi hija y a mis nietas', cuenta Ulisses, cuya esposa se mudó temporalmente a otro lugar para no contraer el virus. 10/05/2020 - 04:058 / 15
- Con una valentía que recuerda a la del Ulisses de la Odisea, este sepulturero atraviesa la tragedia en Manaos y asegura que no le tiene miedo al Covid-19, pese a que ya perdió algunos amigos y vecinos por la enfermedad.
10/05/2020 - 04:059 / 15 - Algunas jornadas, desciende los ataúdes a las fosas comunes que comenzaron a abrirse hace semanas en el cementerio, poco después de que el saturado sistema de salud no diera abasto para atender a decenas de pacientes. Varias personas simplemente fallecieron en sus casas, sin que sus familias sepan si fue de Covid-19 u otra causa. 10/05/2020 - 04:0510 / 15
- Ulisses y un grupo de sepultureros, o 'coveiros' como se dice en portugués, también fabrican marcos y cruces de madera, que las familias de los fallecidos compran para identificar las tumbas de sus seres queridos. Es un ingreso extra para complementar su salario.
10/05/2020 - 04:0511 / 15 - Con el Covid-19 Ulisses y sus compañeros tuvieron que duplicar la producción de marcos y cruces: antes cada 'coverio' vendía tres unidades al día, hoy seis. 10/05/2020 - 04:0512 / 15
- En otras ocasiones, este hombre de mediana estatura se ocupa de cavar tumbas individuales. Después de hacer cinco, queda extenuado. 10/05/2020 - 04:0513 / 15
- Los marcos y las cruces, más baratos que una lápida, se pintan de celeste o azul, y a pulso Ulisses escribe con pintura negra el nombre del finado y la fecha de nacimiento y muerte.
10/05/2020 - 04:0514 / 15 - Vista aérea del cementerio Nossa Senhora, donde el brasileño Ulisses Xavier, de 52 años, ha trabajado durante 16 años, en Manaus, Brasil, en medio de la nueva pandemia de coronavirus. - Xavier trabaja 12 horas al día y complementa sus ingresos haciendo cruces de madera para tumbas. 10/05/2020 - 04:0515 / 15