Tegucigalpa, Honduras.- Con una postura firme en impulsar una ley contra el nepotismo y bajo la premisa de que “diputado que no trabaje, que no se le pague”, un rostro reconocido en redes sociales pero nuevo en la política busca un curul en el Congreso Nacional con el Partido Liberal, acompañado del candidato presidencial Salvador Nasralla.
Rashid Mejía asegura que no se describe como “influencer”, aunque en redes sociales acaparó la atención por crear contenido crítico frente al actual y a pasados gobiernos.
Mejía es licenciado en Relaciones Internacionales, habla tres idiomas y se define “como un hondureño que ama a Honduras”. Confesó que, como muchos compatriotas, tuvo la intención de emigrar para continuar sus estudios, pero hoy apuesta por convertirse en un nuevo rostro en el Congreso Nacional.
Por los ataques y mensajes de odio en su contra, ha decidido mantener su vida personal en reserva. No obstante, en una entrevista con EL HERALDO, en el foro Hablemos de Política, comentó que mantiene una relación desde hace tres años. Además de su faceta política, Mejía se dedica al negocio familiar, el cual apoya desde hace 15 años.
El segundo apellido del joven político es Giannini, perteneciente a una reconocida familia del ámbito empresarial en Honduras. Admite que no ha vivido las mismas carencias que la mayoría de los hondureños en temas de salud y educación, pero sostiene que la empatía es clave para construir propuestas en beneficio de la población.
“Me parece absurdo pensar que porque una persona no ha vivido esas carencias no tenga empatía. (...)Uno no necesariamente tiene que pasar creencias para entender lo que el otro pasa”, argumentó Mejía.
Agregó que su incursión en la política le ha permitido conocer de cerca la realidad del país y los problemas que enfrenta la sociedad.
Aunque en el pasado se consideraba “apolítico”, no optó por participar en un movimiento independiente, porque según afirma, “para crecer en la política es fundamental entender cómo funciona”.
“¿Por qué no militar en un partido independiente? El sistema electoral y político no trabaja de esa forma. El partido necesita estructura; sin estructura no se ganan elecciones. Entender cómo se maneja la política es fundamental para no fracasar”, dijo Mejía.
Aclaró que para cambiar y mejorar un sistema roto “hay que jugar con las reglas rotas”.
Propuestas
Rashid Mejía se declara abiertamente en contra del nepotismo, al que considera un mal enquistado en la política hondureña.
“Estructuras familiares completas han secuestrado la institucionalidad, han secuestrado el Estado, y hoy por hoy la necesidad de una ley antinepotismo para evitar que esto siga sucediendo es una realidad. Usted ve cómo el país se lo están pasando entre familias; de ningún partido político esto es aceptable”, explicó.
Plantea que la ley debe contemplar penas de cárcel y ser regulada mediante procesos abiertos a través del servicio civil. “No basta con la preparación académica, se necesita que quienes aspiren a cargos tengan las manos limpias”, sostuvo.
“La única forma de acabar con este mal es atacando la raíz, con penas severas para todos los que abusen del nepotismo”, enfatizó.
Mejía asegura que no abandonará su papel crítico: “Ese Rashid que todo mundo conoce en redes, dándole, dándole y exponiendo corruptos, lo voy a seguir haciendo en el Congreso Nacional”.
Otra de sus propuestas es la iniciativa “diputado que no trabaje, que no se le pague”, además de eliminar la reelección de diputados y fortalecer la productividad de los emprendedores.
“El banano fue un producto insignia de Honduras, pero dejó de ser una realidad en el comercio exterior porque perdimos capacidad de producirlo. Muchos emprendedores cerraron por los estragos de Eta y Iota”, expuso.
Su propuesta, según explicó, se centra en robustecer la producción nacional y apoyar tanto a pequeños como grandes emprendedores. “Tenemos que garantizar que las empresas se fortalezcan y que quien ponga un negocio tenga acceso a crédito”, señaló.
Un respeto por Donald Trump
Sobre Donald Trump, Mejía aclara que no lo admira como tal, pero sí respeta algunas de sus medidas.
“Considero que la principal causa que él fomenta es preocuparse por su país. Nosotros debemos enfocarnos en que Honduras cambie. Muchas de las cosas que hace se sacan de contexto porque va en contra de un sistema que impera a nivel mundial, y enfrentarse a eso no es fácil”, dijo.
Aseguró que más allá de cualquier simpatía personal, es consciente de que existe un vínculo comercial con Estados Unidos, y por ello es fundamental mantener las mejores relaciones con ese país.
En cuanto a las políticas migratorias de Trump, que han afectado a miles de hondureños, opinó: “Hay que entender que tiene toda la autoridad de ejercer las políticas que considere pertinentes”.
Puso como ejemplo el caso de El Salvador, al que se le renovó el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), a diferencia de Honduras. Según Mejía, esto está relacionado con la gestión de la administración de Xiomara Castro.
“Fue un golpe bajo tratar de eliminar el tratado de extradición, sabiendo que es un interés de seguridad nacional para los Estados Unidos, porque el narcotráfico es catalogado como terrorismo”, recordó Mejía, en alusión a la polémica intención del gobierno hondureño de suprimir dicho acuerdo.