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Vida ganó el clásico al Victoria y festejó bailando Harlem Shake

Los jugadores del Rojo se impusieron a los Jaibos y sacaron los disfraces para celebrar.

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09.03.2013

Vida no se quiere ir. Anoche dio un paso enorme para salir del sótano de la tabla general y aventaja por cinco puntos al Savio que tiene la obligación de ganar hoy pues ha quedado solito en la última posición.

El Vida venció 3-1 a Victoria en el clásico ceibeño y es un triunfo muy importante que se celebró por todo lo alto. Es que este cuadro Cocotero gustó como encaró este partido ante un Victoria que se ha metido a problemas.

Sumó cuatro partidos sin ganar, lleva dos empates y dos derrotas y el equipo de Héctor Vargas de líder que estaba hace unas jornadas ocupa la cuarta posición.

Noche de autogoles

Victoria no se imaginó que los delanteros Ronmel Quioto y Rubilio Castillo entrarían activados en este juego. Nadie los pudo detener.

Al minuto 13, Quioto aprovecha un pase elevado con dificultad, pero sin marca el jugador se levanta y cabecea venciendo a Orlin Vallecillo. Sin embargo, la Jaiba contestó instantáneamente por medio del colombiano Mosquera.

Los dos goles siguientes para el cuadro Rojo fueron errores garrafales del rival. Tras un tiro de esquina, Rubilio cabecea, pero la toca el Pungui Suazo y era el 2-1.

El tercero fue mediante otro autogol. Quioto, queriendo centrar el balón a un compañero, pega en el defensa David Velásquez, venciendo su propia meta.

En el segundo tiempo no hubo goles, pero este clásico se recordará por entretenido, mucho coraje y sobre todo, con varios goles. Además, se registró una aceptable asistencia, más de 4 mil aficionados. Casi al finalizar el partido, Arnold Peralta salió expulsado.

“Hicieron un gran trabajo los muchachos, tuvimos para más, este marcador no refleja lo que se hizo en la cancha, esta noche se tuvo deseo, ganas y se superó en todo sentido al Victoria”, dijo el DT del Vida, Jorge Ernesto Pineda.

Vida celebró con el Harlem Shake

Lo curioso del clásico ceibeño fue que el Vida celebró sus goles bailando el Harlem Shake.

Todos los jugadores del Rojo corrieron a la banca donde los suplentes y asistentes del cuerpo técnico sacaron disfraces y se movieron al ritmo al ritmo que está de moda en internet.