Tegucigalpa, Honduras.- Los aficionados que llenaron el Estadio Morazán de San Pedro Sula se hubieran conformado con un gol como aquel que le hizo a Italia en la final de México 70, cuando se elevó a tal altura que cuando bajó traía pedacitos de nubes enredados entre el cabello. O, ¿por qué no?, uno de chilena.
¡No había nada más bello en el mundo que verlos pedaleando en el aire sobre su bicicleta invisible! Sin embargo, a sus treinta y dos años, después de recibir miles de patadas y con muchos anuncios por filmar, O´Rei Pelé tenía otros planes. Su 1.73 de estatura se iba a presentar al partido, pero su espíritu se iba a quedar descansando en la habitación del hotel Vitanza.
Así que el número 10 que saltó a la cancha aquel domingo 30 de enero de 1972 no era Pelé, sino su fantasma. Santos le ganó 3 a 1 al España (en ese entonces aún no era Real), y aunque Pelé hizo el tercer gol al minuto 60, eso no bastó para enamorar a la hinchada hondureña. Mucho menos a la prensa deportiva.
“Se dedicó a dar saltos de canguritos en lugar de mostrar la calidad de su fútbol, dejando completamente desilusionados a miles de aficionados... No respondió”, señala una de las crónicas de la fecha, que hoy cobran vida gracias a esta alianza El Heraldo-Colección Erandique.
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El 1 a 1 de uno de los diarios sampedranos señaló que “Pelé no pareció muy interesado en lucir sus virtudes. Jugo retrasado y su labor fue conservadora, dedicando más a tiempos a cuidar sus valiosas piernas. Parecía ser de cristal, haciendo continuos reclamos al árbitro cuando era cargado por un contrario y fue otro que vio tarjeta amarilla. No se le vio nada extraordinario, solo un par de jugadas que no salieron de lo común sin duda, su reinado está llegando al final”.
La taquilla fue de 90,854 lempiras. La historia no termina aquí...
Polémica y regreso
Después del amistoso contra el España (que se reforzó con “Indio” Urquía y Mon Paz del Olimpia; Martillo Hernández del Motagua y Arnulfo Echeverría del Marathón), Santos viajó a Costa Rica a enfrentarse al Saprissa. Allá, Pelé brindó ciertas declaraciones que no cayeron en gracia a los “catrachos”.
“El fútbol hondureño solo es de correr”, señaló Pelé, según la publicación de la prensa tica. Lo que el ídolo brasileño no imaginaba es que el Santos volvería unos días después a Honduras, esta vez a Tegucigalpa, para un amistoso contra el Olimpia. Roberto Ruiz, el mítico artista sampedrano, le dedicó una caricatura que fue publicada el 15 de febrero en Diario La Prensa.
“Ajá, en Costa Rica pregonaste lo que aquí no demostraste. Ya verás de lo que es capaz este furioso león catracho”, le dice el Rey de la selva al Rey del fútbol.
Pelé aseguró que sus palabras fueron “sacadas de contexto”. “Yo no podía expresarme en esa forma del fútbol hondureño —señaló, mientras les firmaba autógrafos a los aficionados—. Las declaraciones fueron totalmente tergiversadas. Yo dije que es fuerte y veloz”.
Douglas Montes de Oca, mejor conocido como Doumont, hizo una caricatura en la que se le recriminaba al delantero brasileño por su mala actuación ante el España. Le pregunto a Doumont sobre ese partido, y se queda perdido en el tiempo. Cincuenta y tres años han pasado desde entonces y no recuerda nada de lo que sucedió.
“No me acuerdo cómo jugó Pelé... Por algo hice esa caricatura, pero no tengo detalles de lo que pasó”, se lamenta Doumont.
Lo que sí es cierto es que lo sucedido en San Pedro Sula no tuvo efectos negativos en la hinchada capitalina, y Pelé fue recibido por miles de personas en el aeropuerto internacional de Toncontín.
Cinco décadas más tarde, Lionel Messi jugará en San Pedro, en la cancha del estadio Olímpico. Fecha: sábado 8 de febrero a las 7 de la noche.
El argentino, al igual que el brasileño, es considerado el mejor futbolista de su época, es campeón del mundo y llega en el ocaso de su carrera. En 1975, Pelé, de 35 años, firmó para el Cosmos de Estados Unidos; Messi, ahora con 37, realiza sus últimos actos de magia (sin saber si llegará para el Mundial de 2026), con el Inter de Miami de la MLS.
Pelé superó a Messi en títulos mundiales (3 a 1), en estatura (cuatro centímetros) y en carisma. ¿Y en millones?
Dicen que las segundas partes nunca fueron buenas. Y eso es lo que le pasó a Pelé en Honduras. El 15 de febrero de 1972, ante la mirada angustiosa, desesperada, llorosa, de la fanaticada, volvió a defraudar.
Resultado: Olimpia 0, Santos 0.
En blanco, como el color oficial de ambos equipos... Como el fantasma con el número 10 que se dedicó a deambular con desgano por la cancha del Estadio Nacional de Tegucigalpa...
Microprecios por ver a Pelé
Silla: 25 lempiras
Sombra: 10 lempiras
Sol: 5 lempiras
Precios por ver a Messi
Silla: 8,250 lempiras
Sombra: 6, 050 lempiras
Sol Este: 6,050 lempiras
Sol Norte/Sur: 4,400 lempiras
Palco: 11,000 lempiras
“El Rey, ni en San Pedro Sula ni en Tegucigalpa, demostró facultades de valor excepcional”. “Qué triste ver a un astro opacado por jugadores ´subdesarrollados´, como dijo en San José”. “Estos equipos brasileños andan estafando al público con espectáculos mediocres”, dijo en su momento el periodista Mariano Perdomo Vallecillo.