LOS ANGELES, ESTADOS UNIDOS.- El hombre que se abalanzó sobre una jueza que estaba a punto de sentenciarlo la semana pasada en Estados Unidos compareció nuevamente este lunes ante el tribunal, pero por razones de seguridad apareció usando una máscara similar a la del personaje Hannibal Lecter.
En su nueva aparición en el tribunal de Las Vegas, Deobra Redden estaba esposado, con sus manos cubiertas por largos guantes, llevaba una máscara rígida para impedirle morder y una capucha que apenas dejaba ver sus ojos.
Redden estuvo además flanqueado por varios oficiales cuando llegó a la corte para escuchar la sentencia de la jueza Mary Kay Holthus, a quien atacó la semana pasada.
El ataque fue grabado por el circuito interno de video y explotó como pólvora en las redes sociales en cuestión de horas.
Cuando Holthus afirmó que lo enviaría a prisión en vez de dejarlo bajo libertad condicional, Redden dio un impresionante salto sobre el estrado y cayó encima de Holthus a quien agredió antes de ser controlado por varios hombres en la sala.
Un alguacil resultó herido.
Este lunes Redden regresó a la corte para escuchar la sentencia, que Holthus dijo no fue alterada por el ataque.
“Estoy dejando la página de mi calendario de ese día como evidencia para la corte”, dijo la jueza.
“Esto estaba desde que llegué aquí, antes de lo que ocurrió. Nada cambió en torno a la sentencia que quería imponer”.
La jueza dictaminó una pena de entre 19 a 48 meses en prisión.
Pero Redden enfrenta ahora cargos adicionales por el ataque, entre ellos coacción, extorsión, intimidación de un funcionario público con amenaza de fuerza, menosprecio de la seguridad de una persona con resultado de lesiones corporales importantes, y siete cargos de agresión a una persona protegida.
El acusado tenía que comparecer el jueves pasado para responder por estos nuevos cargos, pero se negó a dejar su celda.
El diario Las Vegas Review Journal dijo que el mandato de un tribunal el viernes indicaba que Redden tendría que ser llevado a la audiencia del lunes “como fuese”.
