Columnistas

El nuevo hospital del sur: otra deuda pendiente

En toda Honduras día a día nos encontramos por las calles, avenidas y bulevares de la vida con la sonrisa burlona y cruel de la impunidad y la corrupción manifestada hoy más que nunca en los miles de compatriotas contagiados y cientos de fallecidos víctimas del covid-19, pero sobre todo de un sistema sanitario saqueado y fallido por tomadores de decisiones corruptos y perversos y que sin ningún escrúpulo, como es su costumbre, continúan delinquiendo, demostrado con la compra sobrevalorada de insumos y equipos de bioseguridad, clínicas, hospitales móviles sin garantías, apropiación indebida de donaciones y un largo etcétera.

Estos actos de corrupción me motivaron a investigar para entender las razones por las cuales no se ha ejecutado el proyecto llamado “Construcción y equipamiento del Hospital del Sur en Choluteca”, que si se hubiera llevado a cabo estaría brindando la atención en salud pública que nos merecemos y que tanta falta hace.

En 2011, los gobiernos de Corea del Sur y Honduras negociaron y se aprobó a través del Exim Bank surcoreano un préstamo para construir el nuevo Hospital Regional del Sur, en Choluteca, por la cantidad de treinta y tres millones doscientos veinticuatro mil dólares ($33,224,000.00) y sumando la contraparte del gobierno hondureño de diez millones trescientos mil dólares ($10,300,000.00) para dicha construcción más nueve millones setecientos mil dólares ($9,700,000.00) para equipamiento del hospital, la inversión total es de cincuenta y tres millones doscientos veinticuatro mil dólares ($53,224,000.00).

En 2012, el gobierno surcoreano le adjudicó al Consorcio Mac-Mirae la realización de los planos y supervisión de las obras de construcción, sin embargo, dicha empresa ha presentado atrasos e incumplimientos contractuales en la elaboración de los planos definitivos los cuales han modificado en cinco (5) ocasiones por discrepancias con instituciones certificadas como lo es la Agencia de Servicios y Proyectos de las Naciones Unidas (UNOPS) a donde fueron remitidos por la Sesal (Secretaría de Salud) cuando los dio por recibidos en el 2014.

La Mac-Mirae exigió el pago de más honorarios por realizar dichos cambios.

Avanza el tiempo, y las autoridades hondureñas y surcoreanas continúan con la misma empresa, y, según el Programa Nacional de Servicios de Salud (Pronasa) y el consorcio acuerdan que el primer trimestre del 2018 se entregará nuevamente los planos finales.

Todos estos perjudiciales atrasos generaron dudas, llamando la atención del pueblo hondureño, y particularmente de los habitantes de los departamentos de Choluteca y Valle, la comunidad internacional y del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA).

Pues bien, el CNA investiga, encuentra y revela muchas irregularidades, entre ellas, la condicionalidad del préstamo donde el Estado de Honduras debe contratar empresas surcoreanas para la elaboración de los diseños de los planos y supervisión de la obras del centro hospitalario.

Infelizmente, la empresa contratada Mac-Mirae posteriormente no cumplió con las obligaciones contractuales, como se ha podido comprobar.

El CNA encuentra además que la empresa surcoreana recibió el pago sobrevalorado de treinta millones de lempiras (L 30,000,000.00) por la elaboración y entrega desfasada de los planos finales en cinco (5) ocasiones, que contienen el diseño de lo que será el nuevo Hospital del Sur en Choluteca. En este mismo tema, el CNA pudo identificar la participación de ocho funcionarios públicos que, con el objeto de defraudar el patrimonio público, recibieron por parte de la empresa los planos finales que no cumplían con los requerimientos mínimos que deben considerarse en la construcción de un hospital, constituyendo sus acciones y omisiones un perjuicio en contra del erario público hasta la fecha, por más de trescientos cuatro millones de lempiras (L 304,000,000.00).

Finalmente, sean las autoridades de la Embajada de la República de Corea del Sur en Honduras, juntamente con el CNA, el Ministerio Público y de ser posibles con instituciones auditoras internacionales de entero crédito las que ayuden a descifrar esta trama de corrupción que por largos años ha obstaculizado la realización de este importante y necesitado centro hospitalario, el cual ya debió ser construido y estar en funciones desde el 2015.

Queda planteado.