No se puede servir a dos amos: Iglesia Católica

Que no se puede servir a dos dioses, advirtió este domingo la iglesia Católica de Honduras a los aspirantes políticos, durante la homilía dominical.

En la misa celebrada en la Catedral de Tegucigalpa, el padre Carlos Rubio pidió a los candidatos a cargos de elección popular evitar la corrupción y ser transparentes delante de Dios y de los hombres, dejando de lado el amor al dinero.

“No
se puede servir a dos amos: a Dios y al dinero, el dinero es una tentación casi universal para el ser
humano”, señaló el sacerdote en su mensaje a la feligresía.

Reconoció que “todos
nos sentimos, más de una vez, tentados por la atracción poderosa del caballero don dinero y cuando digo todos incluyo también a los que por votos (políticos) o profesión hemos estado atraídos por el
dinero”.

Para el representante de la iglesia Católica, el desmesurado afán de obtener dinero ha sido a través de la historia una de las principales causas de guerras, discordias, corrupción política y social, así como de las desavenencias familiares y de toda clase de males.

Lamentó que en la actualidad la corrupción consiste en
“robar
el dinero que está destinado a fines sociales, así como la explotación irracional de los recursos
naturales”.

Calificó de 'negro' el dinero proveniente de negocios ilícitos como el narcotráfico, la extorsión, el secuestro y el
sicariato, y aquel que ha convertido un bien de primera necesidad como es la vivienda, la salud y la educación, en objeto de negocio.

Ante estas amenazas de falta de transparencia, el padre Rubio pidió a los feligreses que “oremos
por los gobernantes para que tengan humildad, para que escuchen a la población y el consejo de los buenos, que amen al prójimo y a la patria, que sean gobernantes y políticos transparentes ante Dios y ante el pueblo, honestos y justos, que trabajen por construir la unidad, la justicia y la paz de los
pueblos”.

El pasado jueves, la embajadora de Estados Unidos Lisa
Kubiske
recomendó investigar de dónde provienen los fondos con que se financían las campañas políticas, en alusión a que dinero producto de actividades ilícitas podría estar siendo utilizado por aspirantes a cargos de elección popular.