Pequeños detalles, grandes sonrisas: Niños disfrutan del trineo navideño de EL HERALDO
La Navidad no es abundancia en todos los hogares, pero un pequeño detalle puede transformar en una gran sonrisa el anhelo de un inocente que solo desea recibir un juguete
- 24 de diciembre de 2024 a las 00:00
En muchos hogares hondureños hay niños que no tendrán una cena caliente ni un estreno especial, mucho menos un juguete que les permita divertirse y soñar, por lo que el trineo navideño de EL HERALDO se desplazó a varios sectores de la capital para encender una sonrisa en el rostro de varios pequeñines.
Un juguete tiene el poder de cambiar una Navidad amarga para un pequeño que, pese a enfrentar una dura realidad cada día, encuentra en su inocencia la fortaleza para sonreír.
La lente de Diario EL HERALDO capturó la alegría de cientos de niños al recibir el trineo navideño. Un pequeño obsequio llenó de inmensa felicidad sus corazones.
Paquetes envueltos con amor, entregados por manos generosas, demostraron que sí es posible marcar la diferencia en las vidas de los más vulnerables. EL HERALDO fue testigo de este momento mágico.
El equipo de este rotativo recorrió varios rincones, llegando hasta lo más alto de Comayagüela, con el objetivo de intercambiar sonrisas y abrazos.
Los periodistas de EL HERALDO se convirtieron en los ayudantes de Santa, y los niños, al ver los paquetes, corrieron emocionados a descubrir qué contenían.
Pero EL HERALDO no solo entregó regalos. Entregó amor, calidez y tiempo a los pequeños, quienes con inmensa ternura e inocencia recibieron al equipo con los brazos abiertos.
Muchos de estos niños no estaban bajo un techo seguro. Algunos trabajaban, portando cajitas para recaudar sus “pascuas”.
Otros permanecían junto a sus padres, enfrentando una vida llena de responsabilidades que no corresponden a su edad.
“Regale un juguete en esta Navidad” es la campaña que con mucho amor EL HERALDO lleva a cabo cada fin de año.
En colonias como Altos de las Cascadas, las reacciones de los pequeños motivaron al equipo de este medio a seguir adelante con esta noble iniciativa.
Han pasado ya 20 años desde que EL HERALDO inició esta hermosa tradición, y la recompensa siempre ha sido la misma: miradas y sonrisas llenas de amor y gratitud.