Jairo perdonó al asaltante que intentó robarle su llantera: recibió amenazas y un mes después lo acribillaron
Dos amenazas habría recibido. Un mes antes de que lo asesinaran, Jairo Cerrato frustró un asalto en su negocio. Atrapó al ladrón, pero decidió dejarlo ir. Fue acribillado en su llantera
- Actualizado: 08 de julio de 2025 a las 00:00
Jairo Cerrato fue acribillado el pasado 7 de julio dentro de su llantera, ubicada en el segundo anillo periférico de San Pedro Sula. Era un hombre muy querido por sus vecinos y clientes, reconocido por su esfuerzo diario.
Sobre su asesinato, las autoridades manejan varias hipótesis. Una de ellas apunta a enemistades personales, según reveló la Policía Nacional, que confirmó que Cerrato habría recibido al menos dos amenazas antes de ser ultimado.
El comerciante se encontraba en su negocio, situado en la colonia Villas del Campo, cerca del sector Los Castaños, cuando varios hombres armados llegaron sorpresivamente y, sin mediar palabra, abrieron fuego contra él. El ataque ocurrió en horas de la tarde y lo dejó sin vida al instante.
El cuerpo de Cerrato quedó tendido entre herramientas y llantas, en el mismo lugar que atendía todos los días. ¡
Agentes de la Policía Nacional acordonaron la escena y comenzaron el levantamiento de evidencias relacionadas al crimen.
Vecinos que se encontraban cerca del lugar relataron que los atacantes se movilizaban en un vehículo y ejecutaron el asesinato con rapidez, sin dar tiempo a que alguien reaccionara.
Algunos testigos también contaron a las autoridades que los sospechosos podrían ser los mismos hombres que, un mes atrás, intentaron asaltar el negocio.
El día del robo, Cerrato logró frustrar el robo y atrapar al asaltante, pero, decidió dejarlo ir. Desde ese día, aseguran, vivía en estado de alerta y con temor.
Foto en vida de Jairo Erizoldo Cerrato Ramírez, el comerciante que fue asesinado en su negocio en el segundo anillo de San Pedro Sula.
La paz en el negocio de don Jairo Cerrato se vio irrumpida por sicarios que sin mediar palabras le quitaron la vida la tarde del lunes 7 de julio en San Pedro Sula.