Empleados de compañía de cable habrían sido raptados en El Pedregal: hallaron su carro abandonado
Mario Medina y Cristopher desaparecieron el 1 de julio tras ser raptados mientras instalaban fibra óptica; este miércoles apareció su vehículo
- 03 de julio de 2025 a las 00:00
La angustia se ha apoderado de los familiares de dos jóvenes trabajadores de una compañía de instalación de televisión por cable e internet, luego de que desaparecieran tras acudir, como tantas veces, a instalar el servicio en una residencia situada en la colonia El Pedregal, en la capital de Honduras. A continuación más detalles.
Uno de los jóvenes desaparecidos fue identificado como Mario Enrique Medina, quien labora como técnico en instalación de fibra óptica.
Cristopher Enmanuel Vallejo, compañero de trabajo de Mario Medina, también fue reportado como desaparecido luego de ser interceptado por desconocidos durante su jornada laboral el pasado martes 1 de julio de 2025.
El carro en el que se conducían los dos jóvenes, con placas HDF 9315, fue encontrado abandonado este jueves 3 de julio en la colonia Miraflores de Tegucigalpa. Tenía las ventanas abiertas y no había rastro de los ocupantes.
Andrea Ortega, esposa de Mario Medina, dijo que habló con él por última vez en la mañana del lunes; desde entonces no ha tenido comunicación.
Los familiares sospechan que los jóvenes fueron raptados en el sector de El Pedregal cuando realizaban una instalación de cable con fibra óptica.
Cabe mencionar que en el carro tampoco se encontraron las herramientas de trabajo de los muchachos, por lo que se cree habrían sido robadas.
Familiares de los desaparecidos comenzaron con la búsqueda desde el momento de la desaparición , avisando a las autoridades policiales.
Andrea Ortega dijo que de momento no pueden asegurar que la desaparición se trate de un secuestro, pues no les han llamado para pedirles dinero a cambio de información o la liberación de los jóvenes. Pero en medio de su desesperación declaró a los medios de comunicación: “Estamos dispuestos a entregar dinero”.
Familiares de Mario y Cristopher mantienen la esperanza de encontrarlos con vida y piden apoyo a la población para dar con su paradero. La zona en donde desaparecieron es considerada una de las más peligrosas de la capital, pues en ella opera la temida Pandilla 18.