Crimen pasional domina las hipótesis en asesinato de ingeniera en San Pedro Sula
La investigación apunta a un crimen planificado, donde la víctima presuntamente cayó en una trampa. La policía analiza teorías, aunque predomina un móvil pasional
- Actualizado: 31 de diciembre de 2025 a las 10:26
Según una fuente del Ministerio Público, las investigaciones en torno al asesinato de la ingeniera Lilian Elizabeth Padilla, de 37 años de edad, en San Pedro Sula, revelan que la hipótesis que más se fortalece es la de un "móvil pasional". A continuación los detalles del caso.
Las autoridades detallaron que, la teoría inicial del crimen apunta a la extorsión, y aunque no ha sido descartada por completo, la línea de investigación apunta a un crimen motivado por "problemas amorosos".
“Por ahora, la línea que más estamos siguiendo es la pasional, aunque no cerramos las otras hipótesis”, afirmó una fuente del Ministerio Público.
Una de las pistas que refuerza esta hipótesis es la información de que Lilian Elizabeth había recibido una nota extorsiva relacionada con la inauguración de una plaza comercial en Santa Bárbara. La víctima debía pagar antes del evento, lo que también mantiene abierta esa línea.
Las autoridades indicaron que la joven de 37 años presuntamente cayó en una trampa tendida por sus agresores. La investigación señala que fue ultimada cuando se disponía a recibir un paquete enviado desde Estados Unidos, en las cercanías del lugar del crimen.
El asesinato ocurrió aproximadamente a las 11:40 de la mañana del pasado sábado 20 de diciembre, a la altura del bulevar Villa Mackay, entre las residencias Los Cedros y Villa Real, cuando la ingeniera conducía su camioneta Toyota Prado, último modelo.
Una de las principales sospechas es que la víctima no solía manejar su vehículo ni realizar diligencias, ya que siempre era su pareja sentimental quien lo hacía.
Según las pesquisas, los sicarios colocaron un sticker de Yeti en el vidrio trasero de la camioneta para identificarla claramente y confirmar que Lilian Elizabeth era la conductora. La presencia del sticker fue clave para los autores del crimen.
La pareja de la ingeniera, al llegar a la escena del crimen, dijo que no reconocía el vehículo. Según su versión, el sticker en el vidrio trasero le llamó la atención y quería saber quién estaba adentro.
El vehículo presentaba más de 25 perforaciones de bala, y en el reconocimiento del cuerpo de Lilian Elizabeth se detectaron al menos siete heridas de arma de fuego.
Los sicarios que asesinaron a la ingeniera se movilizaban en un automóvil Honda Civic color azul, según las investigaciones policiales.
Las autoridades continúan recopilando pruebas y declaraciones para esclarecer el móvil exacto del crimen. La hipótesis pasional sigue siendo la principal, aunque no se descarta ninguna otra línea de investigación en estos momentos.