¿Qué se sabe del ataque de Estados Unidos a tres instalaciones nucleares en Irán?
Estados Unidos lanzó un ataque aéreo contra tres instalaciones nucleares en Irán, en una escalada que podría desatar una crisis regional
- 22 de junio de 2025 a las 00:00
Estados Unidos, en un operativo sin precedentes en la historia de Medio Oriente, impactó duramente en las capacidades nucleares de Irán. La acción, que empezó el sábado 21 de junio, marca una escalada significativa en la tensión de estas potencias, pero ¿qué se sabe del ataque? Aquí los detalles.
Según dieron a conocer fuentes oficiales de Estados Unidos, los bombardeos fueron precisos y dirigidos a tres de las instalaciones nucleares más importantes de Irán: Fordo, Natanz e Isfahán.
Estos sitios están vinculados con el programa de enriquecimiento de uranio y estaban en el ojo internacional, ya que Washington y Tel Aviv afirman que Irán se encontraba a punto de obtener armas nucleares.
El gobierno de Estados Unidos declaró que la operación fue parte de una estrategia para detener el avance del programa nuclear iraní, que consideran una amenaza inminente para la seguridad global.
De hecho, el presidente Donald Trump afirmó que el objetivo era "la destrucción de la capacidad de enriquecimiento de uranio de Irán", y calificó el operativo como un "éxito militar espectacular".
Por su parte, Irán reaccionó con fuerte rechazo. El ministro de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi, calificó los ataques como una "grave violación" del derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y el Tratado de No Proliferación Nuclear. Además, advirtió que Irán se reserva el derecho de responder y tomar represalias por estos hechos.
Las tensiones en la región ya estaban en aumento desde principios de junio, cuando Israel lanzó una ofensiva contra objetivos iraníes en territorio sirio y en el propio Irán, en un intento por frenar su programa nuclear. Desde entonces, los intercambios de ataques y amenazas se intensificaron, llevando la situación a un nivel de confrontación que parecía inminente.
A pesar de los ataques y las declaraciones beligerantes, Estados Unidos afirmó que no busca una guerra con Irán. En un comunicado, el Departamento de Defensa aseguró que la operación no tuvo como objetivo cambiar el régimen iraní, sino prevenir que continúe con sus ambiciones nucleares.
Sin embargo, el mismo Trump consideró la operación como un "éxito único en su tipo", que dejó en evidencia la capacidad de Estados Unidos para actuar en la región.
La operación militar, denominada "Martillo de Medianoche", involucró a 125 aeronaves, incluyendo siete bombarderos furtivos B-2. Entre las armas utilizadas, destacó la bomba antibúnker GBU-57, capaz de penetrar en profundidades de hasta 18 metros de hormigón, una herramienta crucial para atacar los túneles de Fordo, que se encuentra en una remota zona montañosa.
Las evaluaciones iniciales indican que las tres instalaciones sufrieron daños y destrucción extrema. Sin embargo, expertos militares advierten que la profundidad y la complejidad de los túneles iraníes dificultarán la evaluación final del daño, y que Irán podría intentar reconstruir rápidamente sus capacidades nucleares si no se toman medidas adicionales.
Organismos internacionales como la Organización de Energía Atómica de Irán han criticado duramente la acción, calificándola como una "violación brutal" del derecho internacional.
Por su parte, la comunidad internacional mantiene la incertidumbre sobre los efectos a largo plazo de estos bombardeos, aunque asegura que no ha habido un aumento en los niveles de radiación en las zonas afectadas.
Irán, en un primer momento, afirmó que había evacuado las instalaciones atacadas con anticipación, argumentando que no sufrió daños sustanciales. Sin embargo, el gobierno iraní dejó claro que tomará todas las medidas necesarias para responder a esta agresión, y no descartó acciones militares en los próximos días.