Larga espera y fumata negra: así se vivió el primer día del cónclave
Una misa, una promesa, y fumata negra protagonizaron el primer día del cónclave donde 133 cardenales buscan al que será el sucesor del papa Francisco
- 07 de mayo de 2025 a las 00:00
La primera jornada del cónclave que deberá elegir al sucesor del papa Francisco se vivió con algo de impaciencia por miles de personas en la Plaza de San Pedro, aunque tras una larga espera, pudieron constatar que no había acuerdo por la humareda negra que emanaba de la chimenea de la Capilla Sixtina.
Desde la mañana de este miércoles 7 de mayo, los feligreses Católicos llegaron al Vaticano a orar para pedir sabiduría y guía del Espíritu Santo para elegir un nuevo papa.
Los feligreses católicos, de diferentes partes del mundo, ingresaron al Vaticano para presenciar la elección del nuevo papa.
Fue a las 9:01 de la noche (hora de roma) que salió el humo negro desde la chimenea, por lo que se confirmó que no se había llegado a un concenso para elegir al nuevo papa.
Desde la mañana de este miércoles los fieles católicos comenzaron a llenar la plaza. Se estima que más de 30 mil personas estuvieron presentes en el primer día del cónclave.
La plaza de San Pedro del Vaticano y sus aledaños se abarrotaron esta tarde con unas 30,000 personas que no apartaron su mirada de la pequeña chimenea colocada en lo alto de la Capilla Sixtina, ampliada en las pantallas a los pies de la basílica.
Miles esperaron de pie desde horas a que los 133 cardenales se pusieran de acuerdo tras el inicio del cónclave para elegir al que será el nuevo sucesor de Pedro en el Vaticano.
Poco antes de que la chimenea confirmara el desacuerdo, muchas personas empezaban a abandonar la plaza, rindiéndose a la espera y al desasosiego, aumentado al recibir en sus teléfonos rumores de que los cardenales habían decidido irse a cenar y no votar.
Después de la votación, la Plaza de San Pedro comenzó a verse cada vez más vacía, para volverse a llenar en el segundo día del cónclave. Tras esta primera fumata negra, los cardenales volverán a votar por la mañana.
La normativa establece que en los tres primeros días se celebren dos votaciones por la mañana y dos por la tarde. Si tras esos tres días ninguno ha alcanzado los votos necesarios, se procederá a una jornada de reflexión y plegarias en la que no se votará, que sería el próximo domingo. Después volverán a celebrarse tres tandas de siete votaciones, con sus respectivas pausas.
En el interior de esa Capilla Sixtina, con el Juicio Final de Miguel Ángel y las pinturas de otros maestros de la historia como únicos testigos, 133 cardenales de todo el mundo se reunían, aislados del mundo exterior, para elegir un nuevo líder de la iglesia católica.
Ya en la Sixtina y tras cantar el "Veni, Creator Spiritus", himno de invocación del Espíritu Santo, uno a uno, los purpurados juraron observar la Constitución Apostólica "Universi Dominici Gregis" para la designación de pontífice", además de guardar "el secreto" sobre "todo lo que ocurre en el lugar de la elección".
Miles en la Plaza de San Pedro siguieron el inicio del cónclave en las enormes pantallas colocadas en todo el lugar.
Antes de ingresar a la Sixtina, se llevó a cabo la misa "Pro eligendo pontifice", que oficia el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, comenzó este miércoles en la basílica de San Pedro ante la presencia de los 133 cardenales que desde esta tarde se encerrarán en cónclave para elegir al papa número 267 de la historia de la Iglesia.
Cabe mencionar que el nuevo pontífice deberá reunir al menos 89 votos, dos tercios de los 133 electores totales.
El mundo se encuentra a la expectativa de quién será el nuevo sucesor del papa Francisco tras su muerte el 21 de abril