Frank Tavares, el hombre que vivió 22 años como monja y dejó a una sor embarazada
La historia de vida de Frank Tavares está llena de fe, amor y desafíos, narrada en su libro "Encrucijada en la sombra": el hombre que vivió como monja.
- 31 de marzo de 2025 a las 17:59
Frank Tavares en un hombre de República Dominicana que al nacer fue encasillado como niña debido a una malformación en sus genitales, al crecer asumiendo una identidad de mujer descubrió su masculinidad en medio de un romance escandaloso y repudiado en su época. Esta es su increíble historia.
Frank Tavares nació en República Dominicana con una condición en sus genitales que provocaba confusión sobre su sexo. En aquellos años y con poca información sobre esa condición médica a la mano, sus padres optaron por criarla como una niña.
A los cuatro años, Frank enfrentó la pérdida de sus padres en un trágico accidente automovilístico, quedando al cuidado de sus abuelos, quienes al verse incapaces de criarlo, decidieron entregarlo a un convento de monjas, donde creció rodeado de una estricta educación religiosa.
Aunque nunca se sintió atraído por el género femenino en términos de identidad, su educación y entorno lo llevaron a adoptar comportamientos y vestimenta acorde con su crianza. A los siete años, comenzó a notar su atracción por las mujeres, pero siguió desempeñando el papel que le habían impuesto.
Al cumplir los 18 años, Frank, conocido dentro del convento como Sor María Margarita, tomó los hábitos y se convirtió en monja. Al saberse diferente a las demás optaba por bañarse apartado y hasta fingía tener el periodo menstrual para encajar.
Durante su tiempo en el convento, Frank aseguró que no tuvo acercamientos sexuales con las religiosas mayores, pero sí con algunas compañeras internas, lo que complicó su vida religiosa, despertando además en él su virilidad.
Fue en esos años cuando una de sus compañeras, Silvia, se convirtió en su gran amor. A pesar de las estrictas normas del convento, lograron mantener su romance en secreto. Sin embargo, los sentimientos entre ellos se intensificaron, y Silvia comenzó a insistir en que debían dejar el convento para estar juntos libremente.
Fue durante un retiro fuera del convento y con sus sentimientos avanzados que Frank y Silvia vivieron un encuentro íntimo que selló su relación. Aquello no quedaría en secreto, pues poco después Silvia descubrió estar embarazada de Sor Margarita.
Aunque respetaban la sacralidad del lugar donde vivían, su amor superó las barreras impuestas por la vida religiosa. El rumor de su relación comenzó a esparcirse entre las monjas, hasta que Frank no pudo más y abandonó el convento, dejando atrás los hábitos y a una novicia embarazada.
La verdad estalló cuando Frank, en ese momento de 36 años, 22 de ellos viviendo como monja, se debatía entre su fe y su amor por Silvia y la religión. Sentía que estaba traicionando a las monjas que lo habían criado, pero tampoco podía ignorar sus sentimientos.
Hoy Frank, a sus 68 años, cuenta cómo en ese momento la situación llegó a un punto crítico cuando Silvia le confesó que estaba embarazada. Frank, aunque sorprendido, le expresó su apoyo y el deseo de que su hijo fuera una niña que se pareciera a su madre.
Las monjas interceptaron una de las cartas de Frank a Silvia y, tras confrontar a la joven, descubrieron toda la verdad. En 1979, Frank fue expulsado del convento. A pesar de la decepción, las monjas nunca lo desampararon, aunque él jamás volvió a ver a Silvia ni a su hijo.
Sin un lugar a donde ir, Frank utilizó los conocimientos adquiridos en el convento para buscar empleo como costurero, de lo que ha vivido hasta hoy. Su historia ha sido plasmada en el libro "Encrucijada en la sombra: El hombre que fue monja", narra con detalles su historia y los motivos que lo llevaron a aferrarse a una identidad impuesta por las circunstancias de su vida.