Caso Madeleine McCann: encuentran nuevas pruebas que podrían cambiarlo todo
Un periodista británico advierte que las nuevas pruebas encontradas en el dispositivo podrían demostrar que Maddie fue asesinada, conmocionando al mundo
- 13 de mayo de 2025 a las 00:00
El foco mediático volvió al caso de Madeleine Beth McCann, una niña de tres años que desapareció de apartamento de vacaciones en un centro turístico de Praia da Luz, en la región de Algarve, Portugal, el 3 de mayo de 2007.
La policía germana encontró un disco duro perteneciente a Christian Brueckner, el principal sospechoso de la desaparición de Madeleine McCann en 2007.
Según informes exclusivos del diario The Sun, las autoridades consideran que el contenido del dispositivo podría contener pruebas que cambien radicalmente la narrativa del caso, e incluso, que podrían impedir la libertad del sospechoso en su próxima audiencia en septiembre.
El periodista británico Ron Pattinson, quien ha liderado la investigación, advirtió que "el mundo debe prepararse" para lo que será revelado próximamente, ya que las pruebas podrían desafiar toda lógica y decencia.
Pattinson aseguró que "la desgarradora realidad es que podría haber algo mucho peor por venir", haciendo referencia a los detalles estremecedores que, según la policía alemana, contienen las nuevas evidencias.
La investigación ha revelado que el dispositivo puede incluir fotografías y videos que, aun en secreto, demostrarían que Madeleine fue asesinada por Brueckner poco después de secuestrarla.
La misma fuente señala que en el disco duro hay imágenes que explicarían por qué la policía está convencida de que la pequeña inglesa no está viva, alimentando las sospechas desde hace años.
En paralelo, en 2008, Brueckner compró una fábrica abandonada en el Algarve, donde posteriormente se hallaron ropa, juguetes infantiles, máscaras, productos químicos y armas, todo en su momento como parte de la investigación.
En 2016, las autoridades ya encontraron en esa misma propiedad unas 8,000 imágenes de pornografía infantil y objetos relacionados con niños, evidencias que reforzaron las sospechas sobre su implicación en delitos de abusos.
La última excavación en un zulo oculto en 2020, en una parcela cercana a esa fábrica, no solo arrojó restos de un perro, sino también un pen drive con material pedófilo, en un hallazgo que sigue despertando interrogantes.
La investigación también ha vinculado a Brueckner con la desaparición de otra menor de nombre, Inga Gehricke en 2015, en Stendal, a unos 80 km del lugar donde se halló el zulo, lo que alimenta aún más las sospechas.
Según Pattinson, documentos revelan que Brueckner tenía una obsesión enfermiza por secuestrar niños, incluso haciendo referencia a sus métodos para capturarlos y abusar de ellos en chats pedófilos en línea.
El sospechoso incluso confesó en esos chats haber usado éter químico para secuestrar a una madre y su hija en un preescolar, y otros detalles que demuestran su peligrosidad y su fijación con el sufrimiento infantil. Hay evidencias que sitúan a Brueckner que refuerzan más la hipótesis de su implicación y posible responsabilidad en la muerte de Madeleine McCann.
Mientras el mundo espera con ansias el contenido del disco duro, expertos y familiares de la víctima se preparan para la posible conmoción que estos nuevos hallazgos puedan traer.