Pelea de gallos, criadero de peces y patos: Támara está lejos de ser una cárcel
El estilo de vida que llevaban los reos en Támara quedaba lejos de la imaginación de muchos, pues en espacios creados por ellos mismos viven hasta patos, gallinas y peces
- 04 de junio de 2025 a las 00:00
EL HERALDO Plus logró ingresar al primer módulo desocupado por las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP). Aquí se desmantelaron todo tipo de comodidades y lujos de los que estos privados de libertad podían gozar, y donde ahora solo quedan escombros. Así lucen estos espacios:
Ahora todo es un completo basurero, pero días atrás esto lucía como un 'hotel', o al menos algo parecido, considerando el estilo de vida que llevaban estos reos, quienes contaban con diversos privilegios como baños privados, gimnasio, barbería y hasta un propio motel.
Aunque se creía que en el espacio de unos 2,000 metros cuadrados solo habitaban privados de libertad del módulo de Sentenciados 1, dentro del Centro Penitenciario Nacional de Támara, lo cierto es que hasta animales vivían con normalidad en el lugar.
Los más de 700 privados de libertad que vivían aquí fueron enviados a los centros de máxima seguridad en Ilama, Santa Bárbara; La Tolva en Morocelí, El Paraíso, a Siria y al nuevo módulo de Támara.
Miles de preguntas surgen aquí: ¿cómo ingresaron los animales?, por ejemplo. Las peleas de gallos eran algo normal; quizás incluso había apuestas por quién ganaba, pues el dinero, las drogas y el alcohol eran algunas de las cosas que más abundaban en este lugar.
El módulo de bloques está construido en dos niveles, con salida a las terrazas que también eran controladas por un grupo de internos, quienes hacían lucrativos negocios, utilizando las instalaciones como propias, sin que las autoridades les hicieran nada.
En la parte de atrás estaba una crianza de gallinas y patos, pero además tenían gallos de pelea, con los que organizaban palenques los fines de semana, poniendo a pelear a los animalitos.
También tenían una especie de pila, donde están criando peces. Algunos de los privados de libertad, que son adultos mayores, demandan que les lleven alimentos a los animales, pero las autoridades penitenciarias tienen previsto vaciarla y ver si en el fondo hay escondidas armas o cosas ilegales.
En la parte de abajo, estaban los restaurantes de todo tipo de comida, pero también estaba la carnicería 'La Bendición', un negocio donde se vendía carne de res, de cerdo, pollo y hasta pescado.
El coronel de ingeniería de combate Kalter Medina, director de la cárcel, reveló que encontraron una "discoteca con todas las luces y parlantes, había burdeles porque contrataban prepagos, tenían negocios de restaurante, pulperías, barberías y hasta carnicería".
Refrigeradoras, lujosas alfombras, televisores, aires acondicionados, camas matrimoniales, parlantes, conexiones clandestinas de energía, cable para televisión y hasta espacios que funcionaban como pequeños burdeles han sido desmantelados en las últimas horas, según las autoridades.
Hasta la semana pasada los internos eran los que tenían el control de estas celdas. Ellos tenían las llaves de los módulos y eran los que decidían quiénes entraban y salían a ese lugar, pero ahora serán los custodios los responsables del control de las llaves.