La ENEE tiene identificados 150,000 “pequeños consumidores” que facturan menos de 150 kilovatios hora y que a partir de este mes deberán cancelar ese servicio público. El pago por su consumo será efectivo en el recibo de junio próximo.
Rolando Castillo, gerente de Contratos de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, confirmó este viernes que ya cuentan con la información detallada en la base de datos sobre el número de abonados que no continuarán gozando de energía gratis.
Agregó que el departamento de Informática de la ENEE ya digitalizó la información de cada uno de los clientes que están en el rango de consumo de 0-150 kilovatios y que por disposición gubernamental estaban exentos del pago de ese servicio público, pero al ponerse en vigencia el plan de focalización han detectado que miles de los usuarios viven en zonas residenciales, en donde radican personas con sobrada solvencia económica.
El programa de focalización del subsidio eléctrico ha venido siendo aplicado en los últimos cuatro años, ya que inicialmente gozaban de este beneficio aquellos consumidores que estaban en el rango de 150-300 kilovatios.
La medida surge de sendas recomendaciones de organismos como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, quienes han venido insistiendo en la necesidad de controlar el excesivo gasto corriente para elevar el ahorro interno.
El diagnóstico preparado por consultores nacionales y extranjeros contratados por el Banco Mundial tuvo un costo de 600,000 dólares, siendo financiados por ese organismo.
Focalización
EL HERALDO conoció que miles de personas que residen en apartamentos de colonias como Lomas del Guijarro, Payaquí, Tres Caminos, Rubén Darío, Las Uvas, Las Hadas, Los Ángeles, El Sauce, Roble Oeste, Los Hidalgos, Palma Real, Condominios Toncontín, Viera, Loma Linda, Miramontes, Miraflores y Kennedy, entre otras, no pagan el consumo de energía eléctrica porque facturan menos de 150 kilovatios, ya que una de sus características es que pasan poco tiempo en las viviendas.
Sin embargo, a partir de mayo sus cuentas por consumo de energía eléctrica ya no serán pagadas con recursos públicos y tendrán que cancelar sus facturas en las instituciones financieras. Además, en la base de datos se encuentran casas de campo o estancias construidas en playas del Atlántico y del Pacífico hondureño.
El gobierno de Honduras subsidia alrededor de 600,000 pequeños consumidores, denominados así por estar en el rango de 0-150 kilovatios, destinando unos 1,000 millones de lempiras anuales.
Con la eliminación de subsidios para aquellos abonados que residen en zonas exclusivas, la administración central busca ahorrarse 350 millones de lempiras anuales, los que serían destinados para ampliar la cobertura eléctrica, principalmente en aquellas zonas identificadas en el programa de electrificación rural.
Rolando Castillo dijo que hay instrucciones para continuar identificando a aquellos pequeños consumidores que residen en zonas en donde viven personas con capacidad de pago.