TEGUCIGALPA
La concesión parcial de los servicios públicos parece ser el mejor camino para recuperar su rentabilidad, al menos en materia portuaria. Dos de las principales terminales de Puerto Cortés han sido dadas en concesión y con ello se realizan millonarias inversiones en infraestructura y servicios.
Esto ha revivido a la Empresa Nacional Portuaria (ENP), que ha mejorado sus niveles de eficiencia y maneja un mayor volumen de carga.
Tras la concesión de los muelles de contenedores y graneles a empresas especializadas en esas tareas, la ENP ha visto crecer el valor de su patrimonio al pasar de “1,273 millones en 2016 a 1,488 millones en 2017”.
Y es que los mayores ingresos permiten superar la meta de utilidades, las cuales han venido en alza en los últimos cuatro años.
En el balance general, la Empresa Nacional Portuaria (ENP) reporta que el valor de sus activos al 31 de diciembre del año 2017 creció en un 10.6%.
Los activos pasaron de 1,857 millones de lempiras en 2016 a 2,053 millones de lempiras en 2017. El patrimonio de la empresa al cierre del año era de 1,488,299,769 lempiras. Las utilidades netas de la ENP el año pasado, según se establece en el balance, fueron de “215,045,388 lempiras”.
Infraestructura portuaria
La ENP, creada en 1966, es actualmente el ente regulador entre las nuevas operadoras, la empresa de capital filipino OPC (Operadora Portuaria Centroamericana) de la Terminal de Contenedores y la compañía mexicana LOGRA a través de PMH (Puertos Marítimos de Honduras) que construyó y maneja la Terminal de Graneles de Puerto Cortés. En esa misma zona de graneles opera la Terminal Líquida, desde la que se exporta aceite de palma africana y se importan hidrocarburos y un muelle de cabotaje.
La ENP es también el operador de los puertos de Castilla, en Trujillo, Colón (Atlántico), y San Lorenzo, Valle, en el océano Pacífico.
Muelles
En Trujillo operan también un muelle de concreto de 225 metros de largo por 38 metros de ancho en los que atienden buques portacontenedores, cargueros convencionales y graneleros, muellaje, traslado de carga y servicio de montacarga.
Cuentan con tanques de almacenamiento con capacidad de 42,000 galones y dos bodegas con laterales abiertos. Sus principales servicios son: derecho de puerto, pilotaje, atraque y desatraque, anclaje, carga y descarga, agua, energía eléctrica y combustible. Tienen a la transnacional bananera Dole como uno de los principales usuarios de este puerto.
En San Lorenzo tienen un muelle de concreto de 300 metros de longitud en forma de “T” de 40 y 25 metros de ancho, en el que atracan naves de carga general, madereros y graneleros. Aquí se prestan servicios de pilotaje, atraque y/o desatraque, agua, energía eléctrica, almacenaje y equipo contra incendio. Hay equipo de grúas cabezales y montacargas.
En todos los puertos dan servicios de importancia en las zonas portuarias, entre ellos anclaje, atraque, desatraque y remolque de las naves; ayudas a la navegación y balizamiento; practicaje, asignación de espacios a nuevos operadores, mantenimiento de zonas comunes, del canal de acceso, regulación de tráfico, control, custodia y vigilancia.
Ingresos crecientes
Hay que resaltar que no es el canon que recibe por las concesiones de las actividades prioritarias en Puerto Cortés su principal ingreso.
La mayor fuente de ingresos lo reporta el servicio a los buques, que consiste en el apoyo a las actividades de guía y atraque de buques en los muelles del puerto. En esta actividad trabajan unos 700 empleados de la ENP.
Los ingresos que por este servicio se reportaban, al mes de noviembre, eran de 662,060,827 lempiras en 2016 y 652,278,526 en 2017.
En segundo puesto están los ingresos por concesiones, que en el mismo período se situaban en 167,810,969 lempiras, cifra similar a la captada por servicios a los módulos (alquiler de áreas portuarias) que fue de 165.8 millones.
Los servicios de mercadería registraban una leve reducción de 111 millones en noviembre de 2016 a 108.9 millones a noviembre anterior.
Mientras que los servicios de cabotaje bajaron al pasar de 6,423,469 lempiras a 1,103,633 lempiras.
“Esto lo atribuimos al éxito de las concesiones en la retribución por canon, el tema de la mejora de procesos y la transparencia en los procesos y la reestructuración del puerto”, dijo a D&N Edwar Samir Molina, portavoz de la empresa estatal.
“Todo es producto de una integración, de un cambio” al que se vieron obligados una vez que las transnacionales tomaron la operación de las principales terminales en Cortés, agregó.
La concesión parcial de los servicios públicos parece ser el mejor camino para recuperar su rentabilidad, al menos en materia portuaria. Dos de las principales terminales de Puerto Cortés han sido dadas en concesión y con ello se realizan millonarias inversiones en infraestructura y servicios.
Esto ha revivido a la Empresa Nacional Portuaria (ENP), que ha mejorado sus niveles de eficiencia y maneja un mayor volumen de carga.
Tras la concesión de los muelles de contenedores y graneles a empresas especializadas en esas tareas, la ENP ha visto crecer el valor de su patrimonio al pasar de “1,273 millones en 2016 a 1,488 millones en 2017”.
Y es que los mayores ingresos permiten superar la meta de utilidades, las cuales han venido en alza en los últimos cuatro años.
En el balance general, la Empresa Nacional Portuaria (ENP) reporta que el valor de sus activos al 31 de diciembre del año 2017 creció en un 10.6%.
Los activos pasaron de 1,857 millones de lempiras en 2016 a 2,053 millones de lempiras en 2017. El patrimonio de la empresa al cierre del año era de 1,488,299,769 lempiras. Las utilidades netas de la ENP el año pasado, según se establece en el balance, fueron de “215,045,388 lempiras”.
Infraestructura portuaria
La ENP, creada en 1966, es actualmente el ente regulador entre las nuevas operadoras, la empresa de capital filipino OPC (Operadora Portuaria Centroamericana) de la Terminal de Contenedores y la compañía mexicana LOGRA a través de PMH (Puertos Marítimos de Honduras) que construyó y maneja la Terminal de Graneles de Puerto Cortés. En esa misma zona de graneles opera la Terminal Líquida, desde la que se exporta aceite de palma africana y se importan hidrocarburos y un muelle de cabotaje.
La ENP es también el operador de los puertos de Castilla, en Trujillo, Colón (Atlántico), y San Lorenzo, Valle, en el océano Pacífico.
Muelles
En Trujillo operan también un muelle de concreto de 225 metros de largo por 38 metros de ancho en los que atienden buques portacontenedores, cargueros convencionales y graneleros, muellaje, traslado de carga y servicio de montacarga.
Cuentan con tanques de almacenamiento con capacidad de 42,000 galones y dos bodegas con laterales abiertos. Sus principales servicios son: derecho de puerto, pilotaje, atraque y desatraque, anclaje, carga y descarga, agua, energía eléctrica y combustible. Tienen a la transnacional bananera Dole como uno de los principales usuarios de este puerto.
En San Lorenzo tienen un muelle de concreto de 300 metros de longitud en forma de “T” de 40 y 25 metros de ancho, en el que atracan naves de carga general, madereros y graneleros. Aquí se prestan servicios de pilotaje, atraque y/o desatraque, agua, energía eléctrica, almacenaje y equipo contra incendio. Hay equipo de grúas cabezales y montacargas.
En todos los puertos dan servicios de importancia en las zonas portuarias, entre ellos anclaje, atraque, desatraque y remolque de las naves; ayudas a la navegación y balizamiento; practicaje, asignación de espacios a nuevos operadores, mantenimiento de zonas comunes, del canal de acceso, regulación de tráfico, control, custodia y vigilancia.
Ingresos crecientes
Hay que resaltar que no es el canon que recibe por las concesiones de las actividades prioritarias en Puerto Cortés su principal ingreso.
La mayor fuente de ingresos lo reporta el servicio a los buques, que consiste en el apoyo a las actividades de guía y atraque de buques en los muelles del puerto. En esta actividad trabajan unos 700 empleados de la ENP.
Los ingresos que por este servicio se reportaban, al mes de noviembre, eran de 662,060,827 lempiras en 2016 y 652,278,526 en 2017.
En segundo puesto están los ingresos por concesiones, que en el mismo período se situaban en 167,810,969 lempiras, cifra similar a la captada por servicios a los módulos (alquiler de áreas portuarias) que fue de 165.8 millones.
Los servicios de mercadería registraban una leve reducción de 111 millones en noviembre de 2016 a 108.9 millones a noviembre anterior.
Mientras que los servicios de cabotaje bajaron al pasar de 6,423,469 lempiras a 1,103,633 lempiras.
“Esto lo atribuimos al éxito de las concesiones en la retribución por canon, el tema de la mejora de procesos y la transparencia en los procesos y la reestructuración del puerto”, dijo a D&N Edwar Samir Molina, portavoz de la empresa estatal.
“Todo es producto de una integración, de un cambio” al que se vieron obligados una vez que las transnacionales tomaron la operación de las principales terminales en Cortés, agregó.
