Lanzados todos los artificios posibles, el derbi volvió a ser el derbi. El juego que todos esperan hartó hasta a los más caprichosos y a los dos goles de Rojitas se vino un pandemonio que incluyó el baile del perro, tres papeletas rojas y la pelea de Treviño con la grada de Silla, la misma que explotó gritando “fuera Pepe... fuera, Pepe” y, acto seguido, “Tosello, Tosello”.
Intenso, sobre todo en el complemento, el Olimpia-Motagua de ayer expuso en el marcador los actuales niveles de los dos clubes capitalinos: el campeón, con una delantera que siempre golea y con varios elementos en el extremo más alto de su rendimiento, como Alex López, Roger Rojas y Douglas Caetano; el Ciclón, sin carga ofensiva ni amor propio, demasiado quejoso del arbitraje y regalando el partido que ningún hincha bien nacido quiere perder.
Roger empieza su show...
Entendidas las formas en las que Motagua aflojaba en su retaguardia, Alex López y Javier Portillo dispusieron de sendos pases a profundidad para Roger Rojas, el ariete del Albo que gozó del tiempo y espacio justos para celebrar.
Rojitas dilapidó la primera (al minuto 3, cuando estrelló su derechazo en la humanidad de Donaldo Morales), pero llamó a toda su banda de amigos para bailar el “gangnam style” después de una definición al mero estilo de la barriada.
Al 32, esta vez encaró en velocidad la meta motagüense y concluyó la obra con un puntazo de potrero. Ni Júnior Izaguirre (quien fue el hombre que propició la acción con un mal despeje, que robó Portillo) ni Johny Leverón pudieron vencer la habilidad de Rojas, que infló las redes y alegró el primer tiempo con un baile que la moda ha hecho famoso.
Controlado el partido, con las revoluciones al máximo de Luis Garrido en el mediocampo (hasta que llegó la última falta contra Amado Guevara, que lo mandó a las duchas antes de tiempo) y con el creciente ritmo de Douglas Caetano (comenzó errando todo, pero terminó siendo el mejor obrero de la zona explosiva del Blanco), Olimpia ni siquiera resentía el mal gol anulado a Caetano al 37 (grosero error del juez asistente Cristian Ramírez) ni la entrada en calor de Abner Méndez, quien ingresó en vez del Chino Discua para tratar de enderezar la mala noche de un cuadro extremadamente pobre en actitud.
A cerrar el pleito...
Olimpia miraba por encima del hombro a su enemigo y Roger Rojas avisaba que en su escopeta todavía tenía pólvora seca (segundos antes del gol, Donaldo le quitó el grito de la garganta): al 50, un centro de Sebastián Rosano y una habilitación perfecta de Douglas Caetano dejó solo y su alma al matador de barrio Betania, que repitió baile, ahora con más bailarines.
Lo demás fue para el morbo. Treviño contra los olimpistas y contra los mismos motagüenses. Amado contra el árbitro. Welcome y Eddie tratando de pescar un “aleluya” en el área y Portillo (doble amarilla y roja) haciendo más intranquilo el cierre para el equipo de Tosello.
Amo sin discusión. Tegucigalpa es del Blanco gracias a Rojitas.
+ Olimpia celebró sus goles ante Motagua bailando el Gangnam Style
Alineaciones
Olimpia: Escober; Beckeles, De Souza, Palacios, JC García; Garrido, Portillo, Rosano, López; Caetano y Rojas.
Motagua: Donaldo; Oseguera, Leverón, izaguirre, Molina; Cruz, Discua, Barrios, Guevara; Norales y Hernández.
Goles: Roger Rojas a los 32 y 50 minutos.
