Antes de expirar, Orlan Wilfredo Izaguirre Ramírez, de 17 años de edad, corrió unos cincuenta metros en su desesperación por tener ayuda.
La evidencia es que en la acera del bulevar Fuerzas Armadas, a inmediaciones de la Universidad Pedagógica Francisco Morazán, quedó un zapato color negro.
El cuerpo sin vida quedó tirado boca abajo en el pavimento, en la calzada que conduce a la colonia Las Brisas.
Presentaba varios impactos de bala en diferentes partes del cuerpo, pero los que tenía en la cabeza fueron los que finalmente acabaron con su existencia.
La muerte del joven que residía en la colonia Gracias a Dios, a inmediaciones de la colonia El Carrizal en Comayagüela, falleció a eso de la 1:00 PM de ayer, después que fue atacado por personas que no fueron identificadas por las autoridades policiales.
Hasta el lugar de la escena del crimen llegaron los agentes de la Policía Nacional y miembros de las Fuerzas Armadas al igual que personal de Medicina Forense, quienes realizaron el levantamiento del cadáver.
Los agentes de Inspecciones Oculares encontraron en la calzada de la vía de comunicación una pistola tipo revolver, de la cual se desconoce si es el arma homicida o la portaba la víctima en el momento en que fue atacado.
También se desconocen las causas por las que la víctima sufrió el ataque.
