Columnistas

La raíz cuadrada del poder

Hay personas que nacen redondas, pero se cuadran ante el poder y sus transgresiones. De allí nacen las graves repercusiones para el Estado de derecho y la democracia, que deslegitima la función legislativa ante la opinión pública, y sin ningún respeto por sus representantes y sus leyes arbitrarias e inconstitucionales, que respiran en el fango de la incultura democrática. Salvando sus tentáculos del clientelismo, nepotismo, transfuguismo y la farsa de una legislación que se sacude sus responsabilidades soberanas, al nombrar una “comisión de vergüenza permanente” a fin de decidir la suerte del Ministerio Público, al imponer al fiscal general y adjunto, ambos de forma “interina”, -todos sabemos lo que significa este término- sustituyendo el planteamiento de 86 parlamentarios opositores a un circo romano, que suelta los leones de una tiranía, cuyo principal enemigo es la dialéctica política.

Han hecho un cuadrado del método de razonamiento, en vez de alcanzar la verdad mediante el diálogo entre los interlocutores que sostienen opiniones contrarias o diferentes. Negando la democracia, que es esencia inmutable de la realidad que hoy nos venden, ilegalmente como mercadería política en forma de gobierno populista y autoritario, que pretende imponer una verdad absoluta, para instrumentalizar y manipular a una oposición y con miras a descalificar las opiniones contrarias a las del círculo que envuelven un poder legislativo, torpe y fallido.

Es así, que la elección de las nuevas autoridades del MP era un tema que el Congreso venía alterando desde septiembre, cuando una junta proponente depuró una lista de más de 100 candidatos y envió cinco nombres para que se eligiera los fiscales, después de dos meses de no celebrar sesiones y luego de cuatro votaciones, no se lograron los votos requeridos, y encontraron la alternativa que suelen buscar: violencia con patadas, trompadas, botellazos, martillazos, pistolazos e insultos, bombas lacrimógenas dentro del hemiciclo, que más parece una cantina de borrachos de poder y de bandoleros, asaltantes de caminos y sicarios de la política que los envalentona al calor de los privilegios.

Bajo esa cortina de intimidación, aprovecharon los vacíos de la Constitución que autoriza a la comisión permanente a elegir interinamente, en caso de falta absoluta, los funcionarios que debe ser designados por el Congreso... no obstante, esa ley se interpreta con la voluntad despótica de una directiva ilegal, porque dicha comisión no podía seleccionar a estos fiscales, porque hay un fiscal en funciones -Sibrián-, por lo tanto, lo que hubo fue una elección ilegal, un golpe a la Constitución, pues no hay ausencia de fiscal en el MP y deben ser elegidos con 86 votos de la cámara de los 128 diputados, donde la mayoría es opositora y mequetrefe, pintada en una pared, donde se estrella todo argumento. Así funciona este régimen socialista, con falaces izquierdistas de ocasión, desechando las teorías de Marx, donde afirman que la lucha por medio de las fuerzas opuestas de la tesis, la antítesis y la síntesis, se complementan entre sí para ofrecer una visión más completa y crítica de la realidad social, no la de un grupo de aventureros de la política y del populismo deshonesto, adornado en banderas rojas y discursos de papel barato.

Con esta “elección”, se cuadra la lógica matemática y política, en el ejercicio del poder, para la acumulación del control a través de los poderes del Estado, y los derechos y libertades de los ciudadanos. Han concentrado el abuso de la política, por parte de una sola persona y su grupo que cuadra la raíz del poder y la capacidad de controlar y limitar las acciones de un Estado de derecho sin pesos y contrapesos, sin el equilibrio y la sumisión entre los demás poderes, por darle paso a la tiranía y la anarquía que camina soberbia por la alfombra roja de la impunidad.