Una característica del gobierno de Porfirio Lobo Sosa y Juan Orlando Hernández ha sido los constantes cambios a las leyes fiscales que se aplican a las personas naturales y jurídicas que pagan sus impuestos para sostener al “humanismo cristiano”.
Ese cambio de reglas en la administración pública ha contribuido a generar mayor incertidumbre en un país como Honduras, conocido en el ámbito nacional e internacional por la falta de respeto a la seguridad jurídica, altos niveles de criminalidad e invasiones de tierras.
El último zarpazo a la inversión privada ha sido la intención del Poder Ejecutivo y del Congreso Nacional de reformar el artículo 5 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta, contenida en el decreto 25 del 20 de diciembre de 1963.
El 14 de agosto de 2012, la secretaria de la Presidencia, María Antonieta Guillén de Bográn, remitió al Poder Legislativo el proyecto de ley para ampliar la base del ISR de 10% a 25% para un elevado segmento de contribuyentes, principalmente extranjeros.
La mencionada iniciativa de ley fue preparada por la Secretaría de Finanzas, a través de su titular Wilfredo Cerrato Rodríguez.
La discusión y aprobación de la reforma al artículo 5 fue suspendida después que un grupo de diputados protestó por la falta de transparencia en el procedimiento seguido en el Congreso Nacional.
Fue en marzo de 2010, a través de la Ley de Fortalecimiento de los Ingresos, Equidad Social y Racionalización del Gasto Público (Decreto 17-2010), que el Poder Legislativo reformó por última vez el artículo 5 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta.
El asesor de la Secretaría de Finanzas, Hugo Castillo, ha defendido la reforma preparada por la Unidad de Planeamiento, Evaluación y Gestión (UPEG) de la Sefin, y dice que el rendimiento de esa medida será de 800 millones de lempiras en concepto de ingresos tributarios.
La reforma
El proyecto de ley enviado al Congreso Nacional pretende reformar los incisos 1, 2, 3 y 6 del artículo 5, mediante el cual se eleva la base gravable de 10% a 25%.
Lo que se afectará será la renta de bienes muebles e inmuebles, exceptuándose los comprendidos en los numerales 5 y 7 de este artículo; regalías de las operaciones de minas, canteras u otros recursos naturales.
Asimismo, los sueldos, salarios, comisiones o cualquier otra compensación por servicios prestados ya sea dentro del territorio nacional o fuera de él, excluidas las remesas; regalías y otras sumas pagadas por el uso de patentes, diseños, procedimientos y fórmulas secretas, marcas de fábrica y derechos de autor, excepto los consignados en el numeral 12.
Oposición
La presidenta del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Aline Flores, solicitó al Congreso Nacional no penalizar al país con la aplicación de un 25% de Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los extranjeros que residen en el país.
La empresaria dijo que en la nota se les consulta, también, a los parlamentarios cuál es el sustento para que ocurra esta reforma tributaria, que afectará la competitividad de las empresas y alejará la inversión.
Por su parte, el subsecretario de Finanzas, Carlos Borjas, fue del parecer que esperan captar con esta modificación unos 800 millones de lempiras anuales. Además, se aprestan a remitir a la Secretaría de la Presidencia el proyecto de la Ley de Exoneraciones, mediante la cual esperan recaptar unos 1,200 millones de lempiras. Entre ambas legislaciones se proyecta sumar más de 2,000 millones de lempiras en un año.
