TEGUCIGALPA
Hablar de adquisiciones y licitaciones casi lleva implícito el tema de la corrupción. Es en este marco que organismos financieros internacionales están remodelando los procesos para que las adquisiciones sean una cosa dinámica.
“Uno no hace la lucha contra la corrupción enfocando en más control, hay un balance”, dijo a D&N Joao Veiga Malta, director de Adquisiciones para América Latina del Banco Mundial.
El nuevo sistema busca optimizar el gasto público y consolidar la función estratégica de las adquisiciones a la hora de mejorar la eficacia en términos de desarrollo.
Este es un principio que abre las posibilidades de participación a los proveedores pequeños y no solo a los que conocen los procesos, a los grandes proveedores.
Estos mecanismos se abren a más participación de la sociedad y de los beneficiarios “y eso fortalece los sistemas también”.
“Lo que nosotros buscamos es que cualquier proceso de licitaciones debe tener una buena justificación de criterio, y utilizando los mecanismos de sociedad civil y lo demás.
Para la rendición de cuentas es más difícil dar la vuelta al proceso porque tienen que justificar su decisión y eso es a lo que queremos llegar”, dijo Veiga Malta. Los nuevos mecanismos buscan que los requisitos en estos procesos no sean una camisa de fuerza.
“Lo que uno quiere es sistemas donde la justificación de la decisión salga del formalismo del procedimiento, donde es más difícil justificar las malas cosas”, dijo el ejecutivo.
Citó como ejemplo que una empresa puede ser descalificada “por un formalismo, porque la firma no está donde debería estar”.
“Justificar es una rendición de cuentas, no es solo decir yo cumplí con el proceso, es plantear que cumplí con el proceso porque era la mejor opción: comprar el auto correcto y al precio correcto, porque eso tiene un impacto en la calidad de gasto”, apuntó.
Hablar de adquisiciones y licitaciones casi lleva implícito el tema de la corrupción. Es en este marco que organismos financieros internacionales están remodelando los procesos para que las adquisiciones sean una cosa dinámica.
“Uno no hace la lucha contra la corrupción enfocando en más control, hay un balance”, dijo a D&N Joao Veiga Malta, director de Adquisiciones para América Latina del Banco Mundial.
El nuevo sistema busca optimizar el gasto público y consolidar la función estratégica de las adquisiciones a la hora de mejorar la eficacia en términos de desarrollo.
Este es un principio que abre las posibilidades de participación a los proveedores pequeños y no solo a los que conocen los procesos, a los grandes proveedores.
Estos mecanismos se abren a más participación de la sociedad y de los beneficiarios “y eso fortalece los sistemas también”.
“Lo que nosotros buscamos es que cualquier proceso de licitaciones debe tener una buena justificación de criterio, y utilizando los mecanismos de sociedad civil y lo demás.
Para la rendición de cuentas es más difícil dar la vuelta al proceso porque tienen que justificar su decisión y eso es a lo que queremos llegar”, dijo Veiga Malta. Los nuevos mecanismos buscan que los requisitos en estos procesos no sean una camisa de fuerza.
“Lo que uno quiere es sistemas donde la justificación de la decisión salga del formalismo del procedimiento, donde es más difícil justificar las malas cosas”, dijo el ejecutivo.
Citó como ejemplo que una empresa puede ser descalificada “por un formalismo, porque la firma no está donde debería estar”.
“Justificar es una rendición de cuentas, no es solo decir yo cumplí con el proceso, es plantear que cumplí con el proceso porque era la mejor opción: comprar el auto correcto y al precio correcto, porque eso tiene un impacto en la calidad de gasto”, apuntó.
