Editorial

Agilizar procesos para más vacunas

El proceso de vacunación está tomando forma en Honduras, aunque aún queda un largo camino por recorrer, lo que obliga a las autoridades sanitarias y el gobierno a redoblar los esfuerzos por asegurar la adquisición de más inolculantes en los próximos meses, y con ello asegurar que el total de la población podrá contar con sus dosis, de manera gratuita.

Porque la pandemia sigue su curso y está golpeando con fuerza a la población. Mayo ha pasado a ser el mes con las cifras más dolorosas que nos ha dejado la enfermedad desde que se detectaron los primeros casos en marzo de 2020, tanto en el número de muertes como de infectados.

En medio de la desolación, la llegada de los primeros lotes de las vacunas adquiridas el año pasado por el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) con el aval del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), genera esperanzas, pues servirán para la vacunación de sus afiliados y un importante porcentaje de la actual fuerza laboral del país.

Los niveles de coordinación y cooperación entre el IHSS y el Cohep deben copiarse para continuar adelante el proceso de adquisición de muchas más dosis, necesarias para activar lo más pronto que se puede la endeble economía nacional y, también, el sistema educativo que está casi paralizado en detrimento de miles de niños, niñas y jóvenes que por su condición económica están alejados de los procesos virtuales con los que se pretende darles cobertura.

Las autoridades sanitarias y el Gobierno tienen entonces que garantizar que los procesos de adquisición de nuevos lotes de vacunas sean ágiles y transparentes; no tiene por qué ser difícil que den informes detallados de las compras, los proveedores, el monto invertido y los costos, pues la historia de los hospitales móviles, las compras de televisores y cafeteras; de respiradores mecánicos, no debe volver a ocurrir nunca más.