Cartas al editor

Día Mundial de la Energía

No hay ser viviente que no necesite energía para desarrollarse y alcanzar la cúspide de su vida. Los seres humanos, como sus creaciones, no son la excepción de ello.

La diversidad de máquinas de las cuales dependemos no puede desempeñar la función para las cuales han sido diseñadas sin un catalizador energético.

Sin embargo, a la fecha la energía sigue siendo un tema de contradicciones, generando oportunidades y obstáculos para aquellos territorios capaces de aprovechar fuentes energéticas y aquellos que aún carecen de las destrezas para hacerlo respectivamente.

La energía es un elemento generador de democracia y, por tanto, su producción y aprovechamiento son clave para el progreso de las personas y sus territorios.

En virtud de los beneficios que la energía puede brindar es necesario tener presente que todo derecho conlleva una responsabilidad.

El desmedido uso actual de la energía ha provocado tanto un desequilibrio ambiental como social, convirtiéndose en un desafío más a remediar para la humanidad.

Es por esta razón que la fecha del 14 de febrero, aparte de celebrarse el Día de San Valentín, fue designada como Día Mundial de la Energía, con Argentina como aparente lugar de origen, con el propósito de hacer conciencia sobre el uso responsable de las fuentes energéticas y promover la transición hacia fuentes de energía renovables.

En este día nos recuerda que es crucial para la vida y progreso humano maximizar la utilidad del consumo energético y reducir nuestro impacto en el ambiente.