Autócratas van un paso adelante de la Interpol

Algunos países están poniendo a prueba la resiliencia de la Interpol justo cuando la organización centenaria se prepara para elegir a su próximo líder

Expertos dicen que bajo el liderazgo de Jürgen Stock, Interpol ha actuado contra el abuso de sus sistemas. Una asamblea.

jue 14 de marzo de 2024 a las 16:34

Por Jane Bradley / The New York Times

VIENA — Durante años, los hombres fuertes y los autócratas tuvieron una arma novedosa para cazar enemigos políticos. Utilizaron la Interpol, la organización policial más grande del mundo, para cruzar fronteras y apoderarse de ellos —incluso en democracias.

Un premiado periodista venezolano fue detenido en Perú. Un solicitante de asilo egipcio fue detenido en Australia. Y Rusia ha intentado repetidamente lograr el arresto de William F. Browder, un activista de derechos humanos radicado en Londres.

En respuesta, la Interpol ha endurecido la supervisión de sus alertas de arresto, conocidas como notificaciones rojas, dificultando su uso indebido. Pero a medida que se adaptó la Interpol, también lo hicieron los hombres fuertes, recurriendo a los sistemas menos conocidos de la agencia para perseguir a los disidentes, revela una investigación de The New York Times.

$!Stephen Kavanagh ayudó a endurecer los protocolos de arresto en Interpol y puede ser su próximo Secretario.

Por ejemplo, Bielorrusia y Turquía han convertido la base de datos de Interpol sobre pasaportes perdidos y robados en un arma para acosar a los disidentes o dejarlos varados en el extranjero. El abuso de esta importante herramienta antiterrorista empeoró tanto que Interpol vetó temporalmente a Turquía de utilizarla. Bielorrusia ahora es objeto de monitoreo especial después de que la Interpol detectó una ola de entradas políticamente motivadas, dijeron funcionarios.

Y mientras el mundo caía en cuenta de que países como Rusia y China abusaban de las alertas rojas, la Interpol ha visto un aumento en otras alertas. Los avisos azules —alertas que buscan información sobre alguien— más o menos se han duplicado durante la última década, arrojan datos de la Interpol.

Los países están poniendo a prueba la resiliencia de la Interpol justo cuando la organización centenaria se prepara para elegir a su próximo líder.

Con sede en la pintoresca ciudad francesa de Lyon, Interpol actúa como un tablero de anuncios digital que ayuda a los organismos encargados de cumplimiento de la ley en todo el mundo a compartir información sobre fugitivos y delitos. En el mejor de los casos, ayuda a localizar a asesinos y terroristas.

Pero si los gobiernos no pueden confiar en sus bases de datos, la credibilidad de la Interpol se vería socavada.

Aunque la Interpol ahora revisa cada notificación roja antes de su emisión, no examina las notificaciones azules hasta que han circulado. Esas verificaciones a posteriori han identificado 700 alertas desde el 2018 que violaban las reglas de Interpol, de acuerdo con cifras dadas a conocer por primera vez a The Times.

“Es tan preocupante como lo fue el abuso de las notificaciones rojas hace 10 años y condujo a las reformas que tenemos ahora”, dijo Stephen Bailey, abogado y autor del libro “The Legal Foundations of Interpol”.

Bailey dijo que había trabajado para bloquear varios avisos azules y entradas de bases de datos de pasaportes de India. Finalmente se descubrió que todos violaban las reglas de Interpol, dijo.

Una docena de abogados en Estados Unidos y Europa dijo haber visto un aumento en los casos relacionados con el abuso por motivos políticos de sistemas de Interpol menos conocidos.

Samuel Heath, vocero de Interpol, rechazó la idea de que estuvieran aumentando los abusos políticos. Más bien, dijo que las mejoras de Interpol habían facilitado la impugnación de decisiones.

Incluso algunos de los detractores más severos de Interpol reconocen que, bajo Jürgen Stock, su actual Secretario General, la agencia ha logrado avances en la lucha contra el abuso de las notificaciones rojas. Sin embargo, les preocupa lo que sucederá después de que Stock deje el cargo en noviembre.

“La elección de su sucesor determinará si esas reformas se mantienen y avanzan o si Interpol retrocede a los días del Viejo Oeste”, dijo Ted R. Bromund, analista de la Heritage Foundation, un grupo de expertos conservador en Washington.

Los principales candidatos son funcionarios veteranos de Interpol de Gran Bretaña y Brasil, y ambos dicen estar comprometidos a continuar con la supervisión.

Stephen Kavanagh, el candidato británico, ha desempeñado un papel clave en el endurecimiento del sistema de notificaciones rojas en su papel actual como mano derecha de Stock. Se retrata como un líder “confiable y experimentado” y tiene un historial de lucha contra la corrupción en el ámbito policial.

El candidato de Brasil, Valdecy Urquiza, enfatiza la neutralidad de Brasil en asuntos geopolíticos y ha prometido mejorar la diversidad, sirviendo a personas de todas las naciones, incluyendo “africanos, árabes y asiáticos”.

La neutralidad es una piedra angular de Interpol, pero países como Rusia y China la han utilizado para argumentar que Occidente no debería dictar qué notificaciones rojas se aprueban.

La votación se llevará a cabo, muy probablemente en junio, en una votación secreta entre los miembros del comité ejecutivo de Interpol: Argentina, Bélgica, China, Egipto, India, Namibia, Nigeria, España, Turquía, los Emiratos Árabes Unidos y Estados Unidos.

Gran Bretaña ha puesto toda su red diplomática detrás de Kavanagh, quien ingresó a la actividad policial a los 18 años y es visto como un miembro de Interpol, un veterano con conexiones en la actividad policial en todo el mundo.

Interpol nunca ha tenido un Secretario General fuera de Estados Unidos o Europa, y Urquiza está encontrando oídos receptivos a su promesa de ser el candidato del cambio. Abogado de formación, tiene experiencia en la lucha contra la trata de personas y en vigilancia ambiental, un área de particular importancia en África, y en labor internacional.

En diciembre, un Ministro ruso criticó las restricciones que Interpol ha impuesto al País. Rusia figura entre seis países, dijeron funcionarios, sometidos a lo que se conoce como “medidas correctivas”. Estas pueden ir desde una supervisión más estricta hasta la prohibición de publicar en los canales de Interpol.

Los gobiernos de Bielorrusia, Rusia y Turquía no respondieron a solicitudes de comentarios. Un portavoz del Gobierno indio describió las acusaciones de abuso como “infundadas” y dijo que India rara vez utiliza avisos azules, citando 58 el año pasado.

Las notificaciones azules, las solicitudes policiales de información como ubicación, representan un reto más nuevo, que Interpol está revisando ahora. Los países pueden emitir instantáneamente avisos azules en todo el mundo. Cada uno lleva una nota que dice que no ha sido examinado. Otras comunicaciones, como los mensajes directos entre países a través de los sistemas de Interpol, a menudo no reciben ningún control, pero pueden dar lugar a un arresto.

Un aviso azul emitido por Rusia alertó a las autoridades de inmigración estadounidenses en el 2019 sobre un ruso, Vitaly Bogomazov, que vivía en Florida. Los funcionarios de inmigración lo arrestaron por quedarse más tiempo del permitido por su visa. Estaba esperando una decisión de asilo, diciendo que era el fundador de una empresa que publicaba un periódico que criticaba al Presidente Vladimir V. Putin.

La notificación azul afirmaba que lo buscaban por agresión y el homicidio de un hombre que los registros judiciales rusos mostraban estaba vivo. Bogomazov cuestionó su arresto, diciendo ser víctima de una investigación “fabricada y políticamente motivada”, según muestran los registros judiciales. Vive libre en Florida a la espera de una decisión migratoria.

Los funcionarios de Interpol dicen que las notificaciones azules reciben los mismos controles que las notificaciones rojas, pero no de inmediato.

Aunque la Interpol se ha centrado en el abuso de las notificaciones rojas, persisten vulnerabilidades. En diciembre del 2020, Abril Meixueiro huyó de México a su casa en Colorado con su hija pequeña. Le habían concedido la custodia total tras divorciarse de un hombre que describió como violento.

Una noche, recordó, él “me golpeó durante horas”. Presentó una denuncia policial en México y proporcionó fotografías de su rostro magullado y una pared manchada de sangre. La policía concluyó que estaba “sufriendo violencia grave” y un juez dictó una orden de restricción contra su ex marido. (En una entrevista, él dijo que era una “mentira absoluta” que había sido abusivo).

Una vez en Estados Unidos, Meixueiro se enteró de que él había presentado un cargo de sustracción de menores en su contra y que la Interpol había emitido una notificación roja a petición de la policía en México.

Heath, portavoz de la Interpol, dijo que detener la sustracción de niños era un uso apropiado de las bases de datos de la Interpol. Pero dijo que la agencia estaba “preocupada por las circunstancias de este caso” y que investigaría.

La Interpol eliminó los datos de Meixueiro de sus sistemas, pero ella no vuela para evitar ser señalada por la Interpol y enviada de regreso a México.

“Estoy en la lista roja junto a todas estas personas horribles, asesinos en serie y traficantes de drogas”, dijo. “Él no, que fue procesado por violencia doméstica”.

Oleg Matsnev, Emiliano Rodríguez Mega, Flávia Milhorance, Gulsin Harman, Lis Moriconi, Sarah Hurtes y Suhasini Raj contribuyeron reportes para este artículo.

© 2024 The New York Times Company

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