Unos seis mil capitalinos llegan diariamente a las oficinas de Banadesa (Banco Nacional de Desarrollo Agrícola) a reclamar el pago del Bono 10 Mil.
Muchos duermen en las afueras de la institución o llegan en horas de la madrugada, a pesar de las bajas temperaturas que se registran, para luego pasar todo el día en interminables filas bajo el sol, de pie y sin poder moverse para comprar comida o disponer de un servicio sanitario.
En su mayoría, se trata de mujeres solteras que llegan con varios niños, algunos de ellos bebés, así como embarazadas y ancianas. Otras personas llegan antes de los turnos de trabajo, pero muchas veces tienen que irse con las manos vacías.
Durante el año se han hecho distribuciones programadas por escuelas, pero en esta época no se respeta el calendario de entregas, por lo que la demanda rebasa la capacidad de la institución para atenderlos a todos. Desde el viernes pasado miles de capitalinos se han apostado en los predios de Banadesa, pasando por la colonia Villadela, hasta las inmediaciones del Ihss (Instituto Hondureño de Seguridad Social), esperando llegar a la ventanilla en la que se hará el pago de unos mil 600 o cuatro y seis mil lempiras, para unos pocos afortunados. Sin embargo, la institución no está preparada para atender a todos los beneficiarios que aparecen en los listados, aunque muchos llegan a probar suerte por “si les salió”.
La desorganización ha ocasionado que en más de una ocasión se cancelen las entregas por los desórdenes protagonizados por las personas, quienes frustadas desean que se les agilice el trámite.
En medio de esta situación, varias personas se aprovechan de la necesidad de los demás y desde el día anterior se forman en la fila, guardando varios puestos que después venden por 150 lempiras. Uno de los afectados dijo que desde las 5:00 pm del día anterior, los intermediarios que no son beneficiarios se colocaron en la fila y después vendieron los cupos. Asimismo denunciaron que personal del Praf (Programa de Asignación Familiar), les dan los cupos a otras personas para que los vendan.
En Consejo de Ministros, María Elena Zepeda, directora del PRAF, anunció que se entregaría el bono a los beneficiarios de Tegucigalpa, para lo que se trabajaría los fines de semana. El período de entregas finalizará el 30 de diciembre. Por otro lado, la asistencia masiva ha creado problemas para los conductores que circulan por el sector, ya sea hacia el sur o el centro de la capital hondureña, así como los riesgos de que las personas que se agolpan en las aceras sufran un atropellamiento.
