San Pedro Sula, Honduras.
Eran las 6:40 pm de ayer cuando un grupo de feligresas de la iglesia católica San Isidro, de la aldea Río Blanquito, del municipio de Choloma, concluía su reunión semanal.
Estaban tomadas de las manos realizando una oración cuando un disparo interrumpió el momento solemne.
Al abrir los ojos vieron desplomarse a Arabella Briceño Méndez, mientras un hombre salía corriendo de la iglesia.
Entre el horror y la histeria de ver a la señora con el rostro bañado en sangre, al corroborar que tenía signos vitales la trasladaron a una clínica privada de Choloma de donde fue remitida al hospital de área de Puerto Cortés.
Briceño Méndez murió cuando era atendida en la sala de urgencias. “No sabemos como pasó esto, estábamos orando concluyendo nuestra reunión de mujeres de todos los martes, cuando escuchamos el disparo y solo vimos a un hombre de gorra blanca que salió corriendo”, dijo una de las testigos del hecho.
La víctima era una reconocida lideresa de la aldea, era la presidenta del Comité de Agua de la aldea Río Blanquito y recientemente había conseguido para la zona un proyecto de agua valorado en un millón de lempiras, según dijeron vecinos.
Agentes policiales dijeron que desconocen el móvil del crimen y anoche realizaban operativos en busca del sospechoso. Un solo disparo en la cabeza fue el que le quitó la vida a Briceño Méndez. “El individuo entró a la iglesia a matarla, nadie más salió herido y no le robaron nada”, dijo un agente.
Eran las 6:40 pm de ayer cuando un grupo de feligresas de la iglesia católica San Isidro, de la aldea Río Blanquito, del municipio de Choloma, concluía su reunión semanal.
Estaban tomadas de las manos realizando una oración cuando un disparo interrumpió el momento solemne.
Al abrir los ojos vieron desplomarse a Arabella Briceño Méndez, mientras un hombre salía corriendo de la iglesia.
Entre el horror y la histeria de ver a la señora con el rostro bañado en sangre, al corroborar que tenía signos vitales la trasladaron a una clínica privada de Choloma de donde fue remitida al hospital de área de Puerto Cortés.
Briceño Méndez murió cuando era atendida en la sala de urgencias. “No sabemos como pasó esto, estábamos orando concluyendo nuestra reunión de mujeres de todos los martes, cuando escuchamos el disparo y solo vimos a un hombre de gorra blanca que salió corriendo”, dijo una de las testigos del hecho.
La víctima era una reconocida lideresa de la aldea, era la presidenta del Comité de Agua de la aldea Río Blanquito y recientemente había conseguido para la zona un proyecto de agua valorado en un millón de lempiras, según dijeron vecinos.
Agentes policiales dijeron que desconocen el móvil del crimen y anoche realizaban operativos en busca del sospechoso. Un solo disparo en la cabeza fue el que le quitó la vida a Briceño Méndez. “El individuo entró a la iglesia a matarla, nadie más salió herido y no le robaron nada”, dijo un agente.
