Así lucía Paquita la del Barrio de joven, en los inicios de su carrera musical

Francisca Viveros Barradas, mejor conocida como Paquita la del Barrio, ha dejado una huella imborrable en la música mexicana. Su voz icónica, su estilo único y las letras de sus canciones la han convertido en una leyenda.

Foto: @paquitaoficialb

Nació el 2 de abril de 1947 en Alto Lucero, Veracruz, un pequeño pueblo que fue testigo de sus primeros pasos. Desde joven, mostró interés por la música, influenciada por el entorno en el que creció y la música ranchera que escuchaba a diario.

Foto: cortesía

Durante su juventud, Paquita enfrentó múltiples adversidades. Uno de los momentos más importantes y complicados de su vida ocurrió cuando, siendo aún muy joven, se casó con un hombre mayor que la traicionaría repetidamente.

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Fue a partir de estas experiencias de desamor y traición que Paquita encontró la voz que luego definiría su estilo musical.

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Estos primeros años estuvieron marcados por situaciones difíciles, pero también le brindaron las herramientas emocionales y personales para forjar su carácter fuerte y desafiante, el cual siempre ha sido parte de su identidad como artista.

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A finales de la década de los 60, decidió mudarse a la Ciudad de México, una decisión que cambiaría su vida por completo. En la capital del país, vio la oportunidad de expandir su carrera, aunque no fue un camino fácil.

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Fue en la Ciudad de México donde adoptó el nombre artístico de Paquita la del Barrio, un alias que reflejaba tanto sus raíces humildes como su conexión con el pueblo.

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Su estilo único de interpretación comenzó a llamar la atención, particularmente por su característico tono de reproche hacia el machismo y las infidelidades, temas que resonaban profundamente en las mujeres de su generación.

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Paquita la del Barrio se fue abriendo camino poco a poco en los escenarios de bares y centros nocturnos de la Ciudad de México. Su primera gran oportunidad llegó cuando grabó su primer disco en la década de los 80, un álbum que contenía algunas de las canciones que la harían famosa, como “Taco Placero” y “Rata de dos patas”.

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El éxito de “Rata de dos patas” catapultó la carrera de Paquita. La canción, con su letra desafiante y su tono de acusación, conectó inmediatamente con el público. A diferencia de otros artistas del género que centraban sus canciones en el amor romántico o el sufrimiento pasivo, Paquita decidió enfocarse en el desamor desde una perspectiva combativa.

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Con más de cinco décadas de carrera, Paquita la del Barrio no solo ha dejado una marca en la música ranchera, sino también en la cultura popular. Su imagen, siempre acompañada de vestidos coloridos y un peinado característico, se ha vuelto icónica. Además, su frase “Me estás oyendo, inútil”, es repetida por sus seguidores y seguidores como una muestra del poder que ha sabido transmitir a través de su música.

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